La quema de una embarcación pesquera perteneciente a un hombre de apellido Edwards habría desatado la masacre ocurrida en La Bomba de Beverly, Limón, donde acribillaron a Danny Hernández, conocido como Ratón, y a sus guardaespaldas.
Fuentes confidenciales mencionaron a DIARIO EXTRA que el propietario del navío habría culpado a Hernández de prenderle fuego presuntamente por órdenes de un sujeto de apellido Picado y conocido como Shock, a quien Ratón le brindaba seguridad tras sufrir un atentado con armas AK-47 muy cerca de donde se produjo el ajusticiamiento.
Sin embargo, Shock salió ileso, por lo que huyó por la montaña para ponerse a salvo de los pistoleros, instaló un poderoso anillo de seguridad que le cuidaba todos los movimientos, ya que su cabeza como la de Edwards tenían supuestamente un precio de $300 mil.
Ante las presuntas diferencias entre estos dos, ninguno daba facilidades ni oportunidades, pero un descuido de Ratón lo hizo caer en la trampa con su misma gente, ya que su enemigo lo estaba esperando para atacarlo con gatilleros extranjeros.
Según el informe del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Shock tiene 2 carnets de matrícula de armas de fuego a su nombre y un permiso de portación de armas.
Trascendió que este sujeto estaba fuera del país, regresó hace un mes y permanecía en San José. A Limón fue hace poco y el día de la masacre llegó a la finca para ver los avances de una construcción de una casa de montaña.
VENEZOLANOS SIN DOMICILIO
La garganta profunda mencionó que los venezolanos (Zapata, Duarte y Pantoja) le debían dinero a un hombre en Colombia y este les habría dicho que no le pagaran, pero fueran a matar a un sujeto. Les dieron una fotografía de quien sería Shock, el dueño de la finca desde hace 4 años aproximadamente.
Zapata Díaz, de 23 años, dijo al OIJ ser constructor y que reside en la calle, al igual que Duarte Tovar, de 35, quien se dedica a la panadería y no tiene domicilio en nuestro país.
Pantoja Jiménez, de 28 años, aseguró ser comerciante y que había ingresado al país hace 2 meses. Según él, vivía en la montaña de Matama en Limón, cerca de la finca del reconocido Shock. Todos descuentan 6 meses de prisión preventiva. De acuerdo con el reporte judicial, dos de los venezolanos que escaparon (Zapata y Duarte) se metieron a una casa vecina, se acostaron en la cama descompuestos de salud, inclusive vomitaron, se cambiaron de ropa y luego se marcharon, pero fueron detenidos en barrio Westfalia.
SIGUEN CARRO FÚNEBRE
Fuentes confidenciales aseguraron a El Periódico del Pueblo que una carroza fúnebre que transportaba de San José a Limón a dos de las personas asesinadas en la masacre de Beverly fue seguida varios kilómetros sobre la ruta 32 por dos vehículos.
Uno de los occisos es Alejandro Salazar López y del otro no fue posible obtener identidad, quienes recibieron los servicios funerarios de una empresa privada en la capital y los llevaban hasta el Caribe, donde los esperaban los familiares. Eran alrededor de las 9:30 p.m. cuando por el sector de Guápiles, el conductor del auto y su acompañante se percataron de que los seguían, cuando iban a hacer el trasbordo de cuerpos con otro carro de la sede funeraria de Limón.
La alerta se activó y los compañeros en base confirmaron el seguimiento por medio del GPS de la carroza, por lo cual buscaron una escolta para evitar la sustracción de ambos cadáveres.
Al final pudieron llegar a su destino y la entrega de los restos se concretó.
REUNIÓN URGENTE
Trascendió que los magistrados de la Corte Suprema de Justicia se reunieron con algunos jerarcas del OIJ por la preocupación que manejan las autoridades de lo que pasa no solo en Limón, sino en el país.
Personal cercano a DIARIO EXTRA manifestó que el tema obedeció al aumento en la violencia, funcionarios que tienen poca estabilidad y algunos no quieren trabajar en la zona.
Además, hay nombramientos por inopia y muy pocos tienen propiedad.
PERIODISTA: Manuel Estrada
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Martes 08 Marzo, 2022
HORA: 12:00 AM
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