Manos con callos y ampollas deberían gobernar

Marco Tulio Araya Barboza

Cada vez me convenzo más de que la gente que está gobernando nuestro país no conoce al pueblo, no sabe por qué las manos se llenan de vejigas y callos. Han vivido en una burbuja desde que nacieron y lo han tenido todo… desgraciadamente, ahora también tienen poder.
Hoy nos está gobernando una generación que todo lo recibió fácil, que no tuvo que hacer ningún esfuerzo para conseguir el agua, la comida, la medicina, el estudio, los paseos, los instrumentos musicales, los regalos de cumpleaños y Navidad, nunca les faltaron.
A muchos de esos que nos gobiernan les pagaron estudios privados y por eso nunca tuvieron una compañera o compañero que necesitara ayuda para almorzar, para los pasajes o para un libro. Y, cuando lograron graduarse, las influencias de sus familiares les consiguieron trabajo, es decir, ni fila tuvieron que hacer.
No saben lo que es pertenecer a una Asociación de Desarrollo, a una Junta de Educación, Patronato Escolar ni tampoco les hizo falta entrar a una cooperativa para solucionar algún problema. No saben que hay instituciones que cuidan a los niños mientras los padres trabajan, que otras les afinan los talentos artísticos y que también hay programas sociales que tienen la mano a los que menos tienen y que por eso hemos vivido en una relativa paz en comparación con otros países centroamericanos.
Son hijos e hijas de un estado social y protector que hoy, por pura ignorancia, lo están desmantelando. Es que ni siquiera saben por qué tienen lo que tienen ni por qué están donde están.
Por no conocer a la gente de las costas, inventan un pase para ver ballenas y, por nunca haber jugado ni una mejenga de barrio, se inventan el ridículo futbolín como la gran solución para los tiempos de pandemia.
No se dan cuenta de que, al empobrecer al empleado público, están empobreciendo la empresa privada, que se sostiene gracias a que esos empleados consumen en el país. Si no hay dinero, no hay zapatos ni ropa nueva, ni viajes, ni turismo… todo se empobrece.
Con el poder, ayudado por la ignorancia y el desconocimiento de la historia patria, están metiendo tijeretazos a lo loco a programas sociales importantísimos, ceñidos en que el problema está en las instituciones públicas y ni siquiera vuelven a ver los grandes capitales que evaden, eluden, declaran cero ganancias y corrompen para no pagar.
Es importante dejar claro que no todos los que gobiernan nacieron en cuna de oro, algunos conocen al pueblo y las dificultades, saben por qué se hacen callos y ampollas en las manos, pero esos son peores, porque olvidaron sus raíces y se acomodaron con una complicidad que da asco.

*Periodista

PERIODISTA:

EMAIL:

Sábado 24 Octubre, 2020

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Marco Tulio Araya Barboza*