Un infernal incendio acabó con dos viviendas y un galerón de 500 m2, donde habitaban 7 personas, entre ellas dos adultos mayores, dichosamente nadie resultó herido o fallecido. El siniestro se produjo en Bebedero de Escazú, muy cerca del mirador Tiquicia.
Para apagar el fuego los Bomberos de Pavas desplazaron cuatro unidades extintoras, además una ambulancia y una de rescate. Es importante destacar que el camino a este lugar es muy empinado, por lo el peso de los camiones limitó el tiempo de llegada a la escena.
“Fuimos despachados para atender el incendio de dos estructuras en Bebedero, al llegar se confirman dos viviendas y un galerón completamente en llamas. No había personas dentro, se procede a trabajar en el control del fuego, solo daños materiales en 500 m2”, declaró el bombero Edwin Quirós.
El área de Ingeniería del Cuerpo de Bomberos se dedicó a determinar la causa del incendio. De manera preliminar los expertos presumen que una falla eléctrica pudo ser el origen, no obstante esto se comprobará a través de lo que indique el laboratorio.
FAMILIA AFECTADA
Cuando los bomberos atendían la emergencia, varios hijos de doña María Jiménez, propietaria de la casa quemada, estaban camino al mercado, donde venden lo que producen en esta zona, dedicada a la agricultura y la ganadería. No dudaron en devolverse para socorrer a su madre.
Muy afectado, Marco Sandí Jiménez, hijo de los abuelos afectados, relató a DIARIO EXTRA lo triste y difícil que fue ver la casa convertida en cenizas, pero esto no le aplacó el ánimo, pues como familia sabe que van a superar esta difícil situación.
“Estábamos trabajando en el mercado cuando me llamó mi hermano para decirme que se estaba quemando el galerón donde estaba mi mamá durmiendo junto a mi hija y mi sobrina. Todo estaba cubierto por las llamas. Gracias a Dios no hubo pérdidas humanas, pero de las pertenencias no quedó nada”, relató.
AL DÍA SIGUIENTE
Varias horas después del siniestro, DIARIO EXTRA regresó a esta solidaria comunidad, a nuestra llegada todos los vecinos con palas en mano y carretillas estaban recogiendo los escombros. Las personas que viven en las casas aledañas a la de doña María son familia y le prestaban ayuda.
“Yo estaba durmiendo con dos nietas cuando de pronto comencé a oír como un chispazo y escuché vidrios, cuando me asomé por la ventana vi las llamas que salían del otro cuarto. Comencé a gritar y le dije a la chiquita que se levantara, ella salió y de una vez cogió las llaves.
Llamaba a todo mundo, se me ocurrió sacar el cilindro de gas porque lo que pensaba es que eso iba a explotar. Estando afuera volví a entrar para intentar sacar ropa, ya todo se sentía caliente y cuando sentí fue que alguien me sacó”, comentó.
En el galerón que estaba en la parte trasera de estas dos viviendas había animales, que lograron huir cuando empezó el fuego, mientras que las carretas y otras herramientas se quemaron.
Algo particular es que entre los escombros de la casa de doña María los vecinos hallaron la figura de un santo y una bolsa de ropita de bebé que perteneció sus 7 hijos, pasó a sus 23 nietos y 3 bisnietos.
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CRÉDITOS: Fotos: Diego Manzanares / Herbert Arley
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Jueves 14 Septiembre, 2017
HORA: 12:00 AM
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