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Sucesos

Inexperiencia de OIJ brilla en juicio por triple crimen

  • Dos hombres de apellidos López y Sandigo son los únicos imputados por este caso, se supone que deberían ser al menos 5

  • Un agente del OIJ confesó que manipuló un celular hallado en la escena de muerte de una de las víctimas

El que quizá pueda ser catalogado como el caso más violento de homicidio ocurrido el año pasado por fin llegó a sala de juicio tras esperar más 16 meses de investigaciones y fases previas, se trata del triple crimen de Geovani Soto y sus dos hijos, Emanuel y Mauricio Soto Soto.

 

Los atroces asesinatos alarmaron a las autoridades judiciales por la forma en que ocurrieron, sin embargo, apenas iniciado el proceso la inexperiencia de los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) pareciera haber marcado de forma negativa los análisis en el caso. 

 

Geovani, de 52 años, fue hallado en un trillo con más de 32 puñaladas y 2 tiros de gracia en la cabeza, mientras que sus retoños Mauricio (20) y Emanuel (28) presentaban 22 y 10 plomazos, respectivamente, en apariencia todo debido a una deuda por un mal negocio, el cual hasta la fecha se desconoce. 

 

Tal como lo había publicado DIARIO EXTRA en diferentes oportunidades, los hechos se registraron la madrugada del 8 de febrero, aquella vez Emanuel fue interceptado mientras conducía una de las busetas del hotel de la familia, el Mountain Palace, posteriormente fue llevado junto a su padre y hermano a la vivienda familiar, de donde los trasladaron en un microbús y dos vehículos BMW, horas más tarde los asesinaron.

 

La mañana de este lunes el juicio transcurrió con la declaración del investigador Matteo González, quien es uno de los oficiales del OIJ que aquella vez manejaron la información en el caso. 

 

“Fue una gran experiencia para mí, recuerdo que por lo complejo del caso (3 homicidios) todos estábamos muy tensos y queríamos encontrar buena información para hallar un rumbo rápido en la investigación, así que una vez que encontramos un celular de inmediato solicitamos los rastreos telefónicos”, declaró González. 

 

 

INCERTIDUMBRE

 

 

Sin embargo, lo que pareciera una correcta investigación simplemente se volvió una cortina de humo, pues de acuerdo con la declaración del agente, hubo más personas involucradas en los crímenes, mismas que ahora se encuentran desaparecidas en otros países. 

 

Serían en total 5 hombres y una mujer, quienes estuvieron relacionados directamente con los hechos, no obstante, ninguno de ellos están detenidos. 

 

José López y Moisés Sandigo, quienes están siendo inculpados por el triple homicidio, fueron detenidos como principales sospechosos debido a que en la escena localizaron celulares y huellas táctiles de ambos.

 

Lo curioso es que la información poco convincente del oficial del OIJ señala que un hombre de apellido Arquines había amenazado al empresario Geovani Soto ya que que le debía un dinero.

 

Arquines, de nacionalidad nicaragüense, era la mano derecha del hotelero y en apariencia tenía prohibida su entrada al hotel de lujo de la familia Soto.

 

“En una declaración de un familiar de los occisos se nos indica que este señor Yader hizo una llamada telefónica a doña Isabel, esposa de Geovani, diciéndole que diera un mensaje a su esposo, el mismo era que si no pagaba el dinero que le debía iba a saber quiénes eran sus empleados”, detalló el agente OIJ Matteo González. 

 

 

BRONCA

 

 

Otro de los detalles que salieron a la luz durante la audiencia es que la sección de Legitimación de Capitales intervino en uno de los allanamientos en el hotel Mountain Palace.

 

Lo extraño del caso es que esa acción policial se hizo 2 meses antes del crimen, posterior a ello se volvió a revisar la propiedad de la familia Soto, pero esta vez fue la vivienda. 

 

Fuentes extraoficiales indicaron a DIARIO EXTRA que don Geovani Soto había tenido un conflicto con unos extranjeros por un mal negocio que no dio los resultados esperados. 

 

La defensa de los acusados mostró su molestia debido a que las muestras que se han presentado para este caso no revelan nada concreto y hacen falta más personas detenidas por el triple homicidio, además, todas las pruebas están envenenadas por haber sido manipuladas por los agentes del OIJ, en este caso por Matteo González.

 

En horas de la tarde, la esposa del empresario fallecido, doña Isabel Soto, llegó a los tribunales de San Carlos para rendir su declaración sobre los hechos, pero la fiscalía solicitó que el debate fuese privado.

 

Para hoy continuará el juicio con la declaración de otro de los investigadores del lamentable suceso.

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CRÉDITOS: Fotos: Randall Sandoval y Ronny Ordoñez, corresponsal

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Martes 24 Junio, 2014

HORA: 12:00 AM

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