Bisturí al Inder

Editorial

“El órgano contralor llama la atención para que el Inder oriente la inversión de los fondos públicos, es decir que se ponga como norte a los más necesitados”.

Un reciente informe de la Contraloría General de la República nos dice que hay deficiencias en el proceso de planificación del Instituto de Desarrollo Rural (Inder).

Se concluye que esto ha debilitado el liderazgo del Inder como ente especializado en el desarrollo rural y no ha permitido asegurar que se están solventando las necesidades de la población objetivo.

Resulta muy preocupante que se nos diga que cumple parcialmente con el marco regulatorio. Esto por la misma razón de ser de dicho instituto, al tratarse de un ente facilitador en zonas rurales.

El órgano contralor llama la atención para que el Inder oriente la inversión de los fondos públicos, es decir que se ponga como norte a los más necesitados.

Y es que por lo general poco oímos de esta entidad, así como de su efectividad en el apoyo al emprendedor y productor nacional, a pesar del impulso que pretendió darle la última reforma de Ley.

Se quiere que se pueda brindar seguimiento y evaluar los efectos e impactos de los resultados de la gestión institucional de la intervención pública justo para saber que es plata bien utilizada.

Cuando se llama a hacer un análisis integral y sistémico de la normativa, nos deja claro que podría ser que no se esté cumpliendo con lo que realmente manda la Ley.

El Inder es el brazo del Estado, encargado de liderar el desarrollo de las comunidades rurales de Costa Rica, responsable de ejecutar las políticas de desarrollo rural, cuya finalidad es mejorar las condiciones de vida de la población, mediante la articulación de esfuerzos y recursos de los diferentes actores.

Entre otras cosas, la institución se encarga de otorgar créditos para el mejoramiento socioeconómico de las familias beneficiarias. Además, ofrece centros de acopio y un lugar donde pueden llevar a cabo los procesos de prelimpiado, secado y pilado de arroz, desgranadoras, pulidoras de frijoles y un laboratorio para el control de calidad.

Cuando hay tantas comunidades necesitadas de ayuda, resulta increíble que nos digan que el Inder ejecuta proyectos articulados con sujetos privados mediante el otorgamiento de beneficios patrimoniales de recursos líquidos.

Y nos preguntamos cómo se pueden tomar decisiones con sustento en normativa interna, que es incongruente con los alcances de lo dispuesto en la Ley N.°9036.

Si la institución fuera transparente podría dar la lista de quiénes son las organizaciones que han recibido esta ayuda y por qué, así como quién o quiénes aprobaron esos lineamientos internos.

Es duro escuchar de parte del órgano contralor que ni siquiera se sabe si estos proyectos están generando el efecto esperado en el desarrollo rural del territorio.

Y nos preguntamos también dónde estaba la auditoría interna para meter un freno a este tipo de situaciones o al menos alertar de que algo no andaba bien.

Los pueblos rurales necesitan la ayuda del Estado hoy más que nunca, pero para trabajar, no para que les regalen nada, así que bien haría el presidente de la República Rodrigo Chaves en llamar a cuentas al Inder.

PERIODISTA: Redacción Diario Extra

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Miércoles 06 Septiembre, 2023

HORA: 12:00 AM