Con el regreso de las sesiones ordinarias, cada una de los bloques legislativos pretende impulsar proyectos de su interés y uno de los que cuenta con más acuerdos en común es el expediente 21.388, que busca regular la utilización del cannabis para uso medicinal, además de autorizar la producción y comercialización del cáñamo para explotación industrial y alimentaria.
La propuesta, impulsada por la independiente Zoila Rosa Volio, tiene el aval de la mayoría de bancadas legislativas, excepto las de Restauración Nacional (PRN) y bloque independiente Nueva República.
Incluso, en la agenda prioritaria de proyectos, la iniciativa sale en primeros lugares para tramitarse en el Congreso.
De ese modo, el proyecto de ley podría ser aprobado entre septiembre u octubre, si se le da un dictamen afirmativo en la Comisión de Ambiente, se avanzan en mociones presentadas bajo el artículo 137 del reglamento legislativo y, por último, se le da dos votaciones en el Plenario.
“En el PAC lo apoyaremos. Entendemos que el único grupo que se opone es Restauración Nacional. Ellos han advertido que van a hacer una oposición muy dura y que van a presentar bastantes mociones en contra. Yo voy a hacer todo lo posible para que salga en este periodo de ordinarias”, dijo la presidenta de la Comisión de Ambiente, Paola Vega.
Respecto a la urgencia del expediente, Vega dijo que se ocuparán consensos para darle trámite a una iniciativa urgente para el país.
“Acuerdos hay. Esperamos avanzar en el tema. Los opositores dicen que no hay manera de distinguir la marihuana medicinal de la recreativa y eso promovería la drogadicción de los jóvenes. Ellos dicen que es peligroso e incluso toman versículos para oponerse al tema, pero es una iniciativa necesaria para el país”, dijo la oficialista.
En el caso de la bancada de Liberación Nacional (PLN), la jefa de fracción, María José Corrales, aseguró en redes sociales que el proyecto de cáñamo, junto con otras iniciativas de ley, buscan “reactivar la economía, y ayudarle al ciudadano a mejorar su calidad de vida”.
Por su parte, Zoila Rosa Volio, la proponente del proyecto, aseguró que hay un proceso de consensos y aprendizajes sobre un tema que al principio era considerado tabú y generaba rechazo por desconocimiento.
No obstante, con el avance de la iniciativa, “hay más apertura para tramitar un proyecto” que traería empleo, inversiones y aportaría solución a pacientes crónicos.
“Yo espero que este tema, con los suficientes consensos, pueda avanzar en las (sesiones ordinarias) de los próximos tres meses. El PLN, PAC y el PUSC quieren avanzar con el tema y entiendo que el rechazo de algunos es por el tema del cannabis, sin embargo, este proyecto otorgará calidad de vida a los pacientes crónicos. Hay una parte humana en esto y no busca aprobar nada recreacional. Hasta Colombia ya ha avanzado con este tema”, dijo la independiente.
EL PROYECTO
El expediente plantea que se cultive, produzca, comercialice el cáñamo o cannabis no psicoactivo y sus productos o subproductos para fines alimentarios e industriales
En el caso del cannabis, se permitirá la producción, incluyendo la siembra, el cultivo, la cosecha, el almacenamiento y el transporte, así como la producción y la importación de semilla de variedades de cannabis psicoactivo para su venta como materia prima a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) o a laboratorios o establecimientos debidamente autorizados
Asimismo, se podrá tener el mismo trato para medicamentos, cosméticos, aceites esenciales y otros productos de uso médico o terapéutico obtenidos a partir de plantas de cannabis psicoactivo, sus subproductos y derivados.
En cuanto a la regulación, el Estado costarricense, a través del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y el Ministerio de Salud, asumirá el control y la vigilancia de las actividades de producción, la industrialización y la comercialización del cáñamo para fines industriales y alimentarios y del cannabis psicoactivo con fines exclusivamente medicinales y terapéuticos.
Del mismo modo, la Caja podrá otorgar contratos de compra a organizaciones, asociaciones y cooperativas que generen productos de cannabis o cáñamo.
Finalmente, se plantea que el MAG deberá otorgar una licencia para la importación o reproducción de las semillas requeridas para realizar las actividades autorizadas.
Dichas licencias para cultivo y producción únicamente podrán ser otorgadas a organizaciones de productores agropecuarios, constituidas como centros agrícolas cantonales, asociaciones de pequeños y medianos productores, cooperativas agrícolas o de autogestión o asociaciones de desarrollo indígena.
PERIODISTA: Aarón Chinchilla Carvajal
EMAIL: [email protected]
Sábado 31 Julio, 2021
HORA: 12:00 AM
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