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Opinión

Es el segundo banco más grande del país

Editorial

Cuando la plataforma bancaria del segundo banco más grande del país se cae dejando a miles de personas sin acceso a sus cuentas, no basta con una disculpa.

Y no es la primera vez que el Banco de Costa Rica (BCR) enfrenta problemas con sus servicios tecnológicos. Eso hace que la gente se haga muchas preguntas. 

¿Por qué esto no les pasa a los bancos privados? ¿Será otra vez un intento de hackeo? ¿Tendrá que ver con el proyecto para vender el banco? ¿Mi dinero estará seguro? ¿Me habrán vaciado la cuenta? Estas son algunas de las dudas que se leían a través de las redes sociales.

En los negocios financieros sin duda algo con lo que no se puede jugar es con la confianza, y cuando un sistema se va por más de medio día, los usuarios requieren una explicación a fondo.

Tomemos en cuenta que el evento ocurrió entre el viernes por la noche y se extendió hasta el sábado. Pasó demasiado tiempo sin que los usuarios supieran qué sucedía, más allá de la caída en la plataforma.

La información que pueda generar el banco es importante porque ahora se enfrenta al fenómeno de las redes sociales, donde cualquier rumor puede propagarse y generar efectos catastróficos.

¿Cómo no preocuparse cuando se veían mensajes indicando que las cuentas bancarias aparecían en cero? Definitivamente es para asustar a cualquiera.

Las pifias con la plataforma del banco ya llevan varios eventos seguidos, cuando se pensaría que la inversión en tecnología y blindaje deberían ser incalculables.

El grupo cibercriminal Maze hizo público hace dos años que había hackeado los sistemas del BCR y tenía información privilegiada de tarjetas y clientes.

Para aquella oportunidad, se habló de la sustracción de la información de 11 millones de tarjetas de crédito y, para colmo de males, esta misma agrupación había afirmado que el primer ataque al banco había sido realizado en agosto de 2019.

Hoy, la entidad nos dice que tiene una avería en su plataforma tecnológica, pero hasta dónde llegan los derechos de los consumidores financieros, ¿o es acaso que no tienen?

Si se toma en cuenta que la caída en el sistema se dio a pocos días del 30, muchos de los clientes sintieron como si no hubieran recibido el pago del mes.

No pudieron hacer las compras del súper, pagar sus créditos, hacer transferencias por Sinpe, cancelar el alquiler, echar gasolina, y algunos ni tan siquiera tenían para comprarse el almuerzo.

Esto sin contar los comercios que no pudieron hacer las ventas, porque al no haber sistema era imposible efectuar transferencias a cuentas para pagos y utilizar la tarjeta.

A su vez se generó una especie de histeria colectiva, porque la caída de la plataforma del BCR afectó el envío y recepción de dinero hacia y desde otros bancos.

Debemos decir que los clientes tienen razón, si bien la tecnología no es infalible, tampoco se vale que estas cosas ocurran. No se vale pasar más de 12 horas sin poder acceder ni usar el dinero que tanto cuesta ganarse. 

Esperamos por lo menos ver los nombres de los responsables de este desastre y que se tomen las sanciones correspondientes, porque esto no es un hecho que pueda dejarse pasar como si nada.

No es un banco patito, sino el segundo más grande del país y estos errores de servicio no deben, ni pueden, repetirse.

 
 

PERIODISTA: Redacción Diario Extra

EMAIL: [email protected]

Lunes 04 Septiembre, 2023

HORA: 12:00 AM

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