Los olvidados del Bicentenario

Fabio Vega

Las zonas costeras, dígase Puntarenas, Limón y Guanacaste, son las provincias olvidadas en este Bicentenario.

Dicho evento de millonarias luces y drones de celebración en La Sabana y de enormes sombras en las expectativas de trabajo y otras urgencias en estas regiones, marca el final de la pasada centuria de vida independiente.

Lo irónico es que, por sus territorios, es por donde se mueven los motores, aspas y turbinas del nervio económico del país.

Estas provincias maquilladas por el doble rostro de la pobreza (clásica y extrema), según nos informa DIARIO EXTRA, con base en un estudio elaborado por la empresa de reclutamiento ManpowerGroup, no tienen buenas perspectivas de empleo para los próximos meses. Guanacaste, cita la nota de la periodista María Siu Lanzas, presenta el peor resultado pues la expectativa decrece en la comparación trimestral.

Mi provincia, Guanacaste, con valiosas oportunidades de crecimiento, una riqueza mal distribuida y fiel con la tradición de concentrarse en pocas manos, cuenta con grandes coyunturas de inversión extranjera, espacios para la instalación de más zonas francas y, por consiguiente, fuentes de empleo. De aprovecharse estas ventajas, otra sería la realidad.

A qué obedece esa falta de oportunidades, entre otras, de trabajo en las costas y llanuras, sencillamente a que en sus territorios no hay parques empresariales bajo regímenes especiales, como sucede en Heredia, Alajuela y Cartago. Tampoco voluntad política.

Las autoridades nacionales y gobiernos locales solo en sus discursos prestan, a veces, atención al programa de inversión extranjera en área rural, elaborado por CINDE, pues no se pasa de la palabra a los hechos, como sí ocurre en el Gran Área Metropolitana (GAM), donde emplearse es más oportuno.

Abrir espacios de inversión extranjera fuera de la GAM se traduciría en un freno a la migración hacia esos poblados, donde ciudadanos desesperados por emplearse llegan a engrosar anillos de pobreza, en barriadas con necesidades socioeconómicas mayúsculas, principalmente.

Así como oscuro se presenta el futuro laboral en mi provincia Guanacaste, más decadentes son nuestras perspectivas políticas, ante las candidaturas a diputados(-as), postuladas al electorado. Literalmente, en esta vitrina, no hay cara en qué persignarse. Ni modo, esa es la oferta y habrá que votar por “el(la) menos malo(-a)”, sin importar el Partido.

Si el deseo de futuros(-as) legisladores(-as) es crear empleo en Guanacaste, estudien, analicen, presenten y compartan con los ciudadanos el cómo y no el clásico qué de sus iniciativas a desarrollar. Igual petición a los candidatos a Zapote, pero en especial a los futuros residentes de curules adonde no se vale llegar a cafetear, dormir, chatear o jugar solitario.

Al menos marquen un camino novedoso hacia el próximo Tricentenario -del que gozarán nuestros nietos, bisnietos y tataranietos-, muy diferente al que vivieron en el 2021 sus ciudadanos en Puntarenas, Limón y Guanacaste... los olvidados del Bicentenario.

PERIODISTA: Redacción Diario Extra

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Sábado 18 Septiembre, 2021

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Fabio Vega