El Consejo Nacional de Rectores (Conare) calificó de inaceptable la investigación que realiza un equipo de asesores legislativos del Partido Liberación Nacional (PLN) en torno al curso sobre el islam que se imparte en la Universidad de Costa Rica (UCR).
De acuerdo con el presidente del Conare, Alberto Salom, la autonomía universitaria en su aspecto docente también está garantizada por el principio de libertad de cátedra, consagrado en el artículo 87 de la Constitución Política, según el cual “la libertad de cátedra es principio fundamental de la enseñanza universitaria”.
De acuerdo con Salom, la libertad de cátedra se debe entender en su doble dimensión: como la potestad constitucional de la universidad para decidir el contenido de la enseñanza que imparte, sin estar sujeta a lo dispuesto por poderes externos a ella, y como el derecho individual de los docentes a expresar sus ideas a lo interno de la institución, permitiendo la coexistencia de diferentes corrientes de pensamiento.
La reacción del Conare surge luego de que se hizo pública la solicitud de Clara Liberman, ex vicepresidenta del PLN, para que dicha fracción legislativa investigara la cátedra sobre el islam que desde 2009 se imparte en la UCR.
En una nota del 6 de octubre dirigida a los diputados verdiblancos, Liberman criticó la apertura de la cátedra con la interrogante: “¿Cómo lograron abrir una cátedra de este tipo, exclusivamente de la religión musulmana, en una de las instituciones más importantes de Costa Rica?”.
Según la nota suscrita por los rectores Alberto Salom de la Universidad Nacional, Henning Jensen de la UCR, Julio César Calvo del Instituto Tecnológico, Luis Guillermo Carpio de la Universidad Estatal a Distancia y Marcelo Prieto Jiménez de la Universidad Técnica Nacional, la investigación es una grave afrenta al libre ejercicio de las garantías individuales de libertad ideológica, de pensamiento y expresión para los docentes universitarios y una clara intromisión en el régimen constitucional de autonomía universitaria.