El Parkinson y su influencia en la alimentación
Opinión
El Parkinson es una enfermedad causada por la reducción del neurotransmisor llamado dopamina, el cual tiene funciones como regular los movimientos del cuerpo y el estado de ánimo.
Según la OMS, la persona con Parkinson presenta síntomas motores como lentitud de movimientos, temblores, rigidez, trastornos de la marcha y desequilibrio y complicaciones no motoras como deterioro cognitivo, trastornos mentales, trastornos del sueño, dolor y otras alteraciones sensoriales, incluso la depresión.
Estos síntomas motores hacen que, para el paciente (especialmente en etapas avanzadas), se le dificulte comer. El simple hecho de llevarse la cuchara a la boca supone una tarea titánica o el sostener un vaso en sus manos sin regar parte del contenido se vuelve todo un reto, generando una barrera para poder alimentarse adecuadamente y sin ayuda.
Adicional a eso, muchos pacientes desarrollan demencia, lo cual en algunas ocasiones genera que olviden comer o tomar sus medicamentos.
En Costa Rica, la incidencia de personas con la enfermedad de Parkinson es similar a la del resto del mundo, la cual se aproxima a 8 casos por cada 100.000 habitantes por año. Según un estudio de la Universidad Hispanoamericana, este padecimiento también ha provocado la muerte de 1.830 pacientes entre los años 2000 al 2022. De ellos 178 decesos solo en el 2022. Un promedio de 15 decesos por mes entre 2019 y 2022. Dentro de los múltiples síntomas presentados por el paciente con Parkinson, algunos dificultan especialmente el acto de comer podemos citar:
* El babeo: La persona mueve menos la boca, por lo que traga menos alimento o parte del líquido se desliza fuera de su boca.
* La disfagia: dificultad para tragar sus alimentos.
* Cambios de peso inexplicables.
* Los síntomas motores como el temblor de manos, impiden el llevar la cuchara a la boca.
* El desbalance del cuerpo puede limitar la acción de sentarse para comer en una posición adecuada.
* Sin olvidar el estreñimiento o la osteoporosis, muy frecuentes en esta población.
* Los medicamentos para tratar el Parkinson pueden causar efectos secundarios como náuseas y falta de apetito.
RECOMENDACIONES
NUTRICIONALES
* Usar pequeñas cantidades (en abundancia puede agravar el estreñimiento) de espesantes para los líquidos como caldos o sopas, puede disminuir el riesgo de que el líquido se deslice fuera de la boca.
* Consumir grasas saludables: por ejemplo aguacate, mantequilla de frutos secos, pescados azules (por su contenido de omega 3)
* Coordinar las horas de comida según los fármacos: Dependiendo del medicamento, puede verse afectada su absorción si se consume junto con proteínas o en otros casos si se toma con el estómago vacío puede ocasionar náuseas.
* Las personas mayores de 50 años deberían consumir diariamente 1.500 mg de calcio y 800 UI de vitamina D, es fácil cubrir dicho requerimiento, basta con incluir regularmente alimentos como lácteos, el jugo de naranja y las verduras de hojas oscuras y pescado grasos.
* Consumir alimentos ricos en fibra como panes integrales, salvado de avena, leguminosas y beber abundante líquido para contrarrestar el estreñimiento.
* Incluir frutas y vegetales a diario ayudan tanto con la hidratación como con el estreñimiento. En especial, las semillas de chía, papaya y las ciruelas.
* Los alimentos ricos en vitamina E tales como el germen de trigo, las nueces y semillas, y el aceite de origen vegetal como aceite de oliva extra virgen.
Algunos estudios sugieren que el desbalance en la microbiota intestinal y la producción de neurotransmisores como la dopamina podrían estar ligados, ya que parte de la producción de este y otros neurotransmisores se generan a nivel gástrico. Por lo tanto, es importante mejorar la microbiota consumiendo alimentos pre y probióticos como el yogur, kéfir, alimentos fermentados, frutas y leguminosas.
Siempre es necesario individualizar cada caso y visitar a un nutricionista para que le brinde las recomendaciones más acertadas según las necesidades de cada uno y así, tanto el cuidador como el paciente, recibirán la información más acertada y podrán mejorar las condiciones de salud del paciente con Parkinson.
*Colegio de Profesionales en Nutrición
