Larissa Arroyo, abogada especialista en derechos humanos y género, cuestionó la campaña #antetodomujeres que un grupo de diputados dio a conocer este jueves como preámbulo del Día Internacional de la Mujer, por reproducir estereotipos y no atacar la discriminación y violencia que las féminas sufren desde sus causas estructurales.
Alrededor de 15 legisladores llegaron al plenario este jueves en tenis blancas y en el caso de las diputadas del Partido Acción Ciudadana (PAC) vestidas de rojo, para en conferencia de prensa dar a conocer los detalles de la campaña que surgió desde la Unidad Técnica de Igualdad de Género del Congreso.
Según la socialcristiana Shirley Díaz, lo que buscan con esta campaña es fortalecer el concepto de sororidad femenina.
“Sororidad femenina es solidaridad entre nosotras las mujeres y pasa por diferentes valores y principios que nos permiten ser más humanas, más respetuosas y más unidas unas con otras, reconociéndonos como pares capaces de llevar grandes transformaciones sociales en nuestro beneficio y en beneficio de nuestros proyectos y derechos”, explicó.
La campaña exalta 8 pilares donde se pide a las mujeres no atacarse unas a otras en temas de apariencia física o pensamiento político o religioso (ver recuadro).
SUPERFICIAL
Sin embargo Arroyo lamentó que las diputadas y las técnicas que trabajan con recursos públicos no buscan ahondar sobre los problemas de discriminación, violencia y desigualdad que enfrentan las mujeres, y que más bien se enfocan en puntos superficiales, incluso con un discurso que culpa a las propias féminas.
“Se utilizaron en esta campaña estereotipos que lo que hacen es perpetuar esa discriminación basada en algunos conceptos de costumbres o tradiciones de lo que se impone las mujeres debemos ser”, expresó la abogada especialista en género.
Agregó que no se está tratando la discriminación y violencia como un problema con causas estructurales, que la solución, sobre todo estatal, debe ser precisamente atacar el tema de manera estructural y no superficial, a través de expresiones como decir que no se va a criticar la apariencia física de las otras.
“Por supuesto que no se debería hacer. Es algo tan obvio que debemos partir del respeto a las otras personas, no burlarnos de las otras personas, pero cuando estamos ante casos de femicidios, ¿cómo podemos culparnos entre nosotros por no ser sororarias?”, cuestionó Arroyo.
Explicó que urge entender que la sororidad no es no permitir criticar a una mujer por el solo hecho de serlo, eso sería discriminación.
“Entonces cuando uno de los puntos de esa campaña dice que se comprometen a no atacar posiciones políticas o religiosas de otra mujer, aunque no sea de mi agrado, primero que todo es un absurdo porque están en la Asamblea Legislativa, donde se espera que haya debate y crítica, que debe darse siempre en un marco del respeto”, finalizó.
LOS COMPROMISOS
Me comprometo a parar de juzgar la apariencia física propia y de las demás.
Me comprometo a no ser cómplice cuando una mujer quiera hablar mal de otra.
Me comprometo a generar una red de seguridad a mi alrededor donde cada mujer que se acerque a mí se sienta suficientemente segura para hablar de cualquier tema.
Me comprometo a no justificar el acoso o la violencia hacia otras mujeres.
Me comprometo a evitar describir negativamente a otra mujer diciendo que es débil, dramática o histérica.
Me comprometo a no atacar posiciones políticas o religiosas de otra mujer, aunque no sean de mi agrado.
Me comprometo a actuar como aliada ante situaciones de opresión, aunque no comparta puntos de vista con la otra mujer.
Me comprometo a ser amable y generosa con las demás.
PERIODISTA: Bharley Quirós Navarro
EMAIL: [email protected]
Sábado 09 Marzo, 2019
HORA: 12:00 AM
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