Diario Extra - Ejecutan amigas de 5 tiros

Las autoridades judiciales investigan el homicidio de dos jóvenes amigas cuyos cadáveres fueron lanzados a un barranco luego de que les propinaran impactos de bala en la cara.
El violento hecho ocurrió cerca de Puente Negro en la comunidad de Calle Los Sanabria en Orosi de Paraíso, Cartago.
En la oficina de prensa del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informaron que una de las víctimas fue identificada como Sonia Morales Nicaragua, de 22 años, recibió dos impactos en la cabeza y aparece casada desde hace cinco años con un hombre apellidado Valverde Mora.
La segunda sería su mejor amiga Michelle Adriana Velázquez Castro, quien tenía 26 y era madre de una chiquita de tres años, esta presentaba 3 disparos también en la cabeza. Ambas víctimas son vecinas de Higuito, Desamparados, San José.
Precisamente un hermano de Morales confirmó la tragedia tras una publicación en sus redes sociales en la que manifestó desear que todo se tratara de un sueño.
“Quién diría que esto sucedería, no puedo creer cómo ayer estabas conmigo y en unas horas estuvieras en otro lugar, al que llaman una mejor vida, te amo mi hermanita. Es duro y difícil aceptar, aún sigo sin creerlo, esperaría que fuera un sueño y poder despertar de esto algún día”, escribió.

VECINOS ALERTAN

Los hechos que finalizaron con la vida de estas dos mujeres iniciaron la noche del viernes, a las 8 p.m. ambas salieron de sus viviendas y por razones que no están claras, aparentemente, habrían sido interceptadas por al menos dos personas que tiempo después las trasladaron hasta la comunidad brumosa.
De acuerdo con el reporte preliminar de los agentes de la delegación regional del OIJ en Cartago, una vez ahí las llevaron a ese sector solitario donde les dispararon en múltiples ocasiones para luego lanzarlas en un barranco.
Posteriormente, los sospechosos se dieron a la fuga supuestamente en un carro y a toda velocidad, ya que nadie pudo observarlos.
Las detonaciones las escucharon los lugareños, quienes asombrados salieron para ver qué había ocurrido, siendo que cuando se acercaron al guindo observaron que a unos 7 metros de profundidad estaba una de las jóvenes malherida y toda llena de sangre, por lo cual de inmediato alertaron al servicio de emergencias.

RESCATE Y RASTREO

Tiempo después al sitio arribaron los paramédicos del Cuerpo de Bomberos y Cruz Roja, quienes tuvieron que utilizar equipo especial para descender por el precipicio con el fin de rescatar a la paciente.
Tras varios minutos de trabajo los socorristas lograron llegar hasta donde estaba la joven y determinaron que tenía múltiples heridas de arma de fuego, las cuales le arrebataron la vida.
Mientras se encargaban de atender a esta veinteañera los cruzrojistas se percataron de que a pocos metros se observaba otro cuerpo, por lo que siguieron descendiendo y confirmaron que se trataba de otra mujer que también tenía varios plomazos, siendo que al tomarle los signos vitales confirmaron que tampoco había nada que hacer por ella.
Según informaron en el OIJ, en una revisión preliminar los agentes determinaron que a las dos jóvenes les dispararon principalmente en la cara y cabeza, en el caso de Morales ella recibió dos, mientras que Velásquez tenía tres disparos.
Los paramédicos se encargaron de llevar a las dos fallecidas hasta la calle para dejarlos bajo la custodia de los oficiales de Fuerza Pública.
A la escena se presentaron los investigadores quienes se encargaron del levantamiento de ambos cadáveres para remitirlos a Medicatura Forense, donde les hicieron la autopsia mientras avanzan las pesquisas para esclarecer qué motivó el doble asesinato, así como ubicar a los responsables.
Asimismo, tras confirmarse el lamentable incidente la policía realizó amplios operativos y recorridos en la zona para tratar de ubicar a los sospechosos, pero no fue posible.

TATUAJES AYUDAN

En la policía judicial revelaron algunas características de las dos víctimas como tatuajes que ayudaron a constatar sus identidades.
Según explicaron, el día en que las asesinaron, una de ellas vestía una blusa blanca de seda, jeans azul y tenis negros.
Esta joven tenía dos tatuajes; un reloj junto a una rosa en el brazo izquierdo, así como el rostro de una mujer y una rosa en la pierna derecha, diseños que permitieron establecer que se trataba de Morales.
La segunda femenina llevaba puesto un vestido negro, un sueter largo tipo cardigan y tenis de colores. En su caso ella tenía un tatuaje en el abdomen con el nombre “Adriana” y dos rosas con un tribal en el brazo izquierdo, los cuales revelaron que era Velásquez