No se deje garrotear

Ojo a este dato, un 67% de los comercios en el Gran Área Metropolitana incumple en diferentes grados los aspectos técnicos del etiquetado de juguetes que se comercializan justamente de cara a las compras navideñas.

Lo anterior se desprende del último informe del Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC) que realizó un proceso de visitación a 18 locales comerciales y valoró unos 108 juguetes en precio y etiquetado.

Los comercios que incumplieron con estos parámetros tienen 30 días naturales para corregirlo tras lo cual deberán emitir una declaración jurada debidamente certificada donde se hace constar el cumplimiento.

Este dato, aunque parezca insignificante, es de suma importancia, al igual que las valoraciones hechas por el MEIC con el precio de los productos y los indicados en los anaqueles, en este punto la autoridad encontró que los 18 establecimientos cumplen la ley.

De lo que no advirtió este año el MEIC es la variación de precios, los compradores no saben de boca del ente competente si los comercios están inflando o no los costos de los artículos, por tanto, tendrá que caminar, comparar y por supuesto planificar las compras, tomando en cuenta que el país ha tenido algunas dificultades económicas.

Cabe destacar que la temporada navideña es un momento ideal para que el Ministerio hubiese informado a los consumidores sobre esos detalles, pues para nadie es un secreto que la cosa ha estado fácil y pese a que el país necesita que la gente salga a gastar los cincos, no se puede tampoco tapar el sol con un dedo u ocultar datos relevantes del comportamiento del comercio.

Con el aguinaldo en la mano y pronto el salario de la primera quincena de diciembre, una buena parte de la población se lanza a comprar desmedidamente. Las calles están de locos y en muchas vitrinas exponen ofertas que terminan siendo una verdadera falsa.

El dinero en esta época es lo que más circula y la gente llega con grandes listas de regalos y solo paga, paga y paga, sin antes fijarse en lo que le conviene.

Y aunque estemos en tiempos difíciles, lo cierto es que en medio de la alegría de la fecha se nos va la pajarita que debemos ser cuidadosos.

Otro de los factores que se confabulan en la gastadera es el poco tiempo del que se dispone para hacer los mandados, pues reduce la posibilidad de caminar y comparar. Pero eso no es excusa para no administrar bien los centavos que nos ingresan con el decimotercer salario.

Los ticos como es nuestra costumbre dejamos todo para última hora, descuidamos los compromisos financieros y olvidamos los riesgos de cada diciembre.

Las carreras y la mala planificación podrían salirnos bien caras, por eso tome un rato para ordenarse.

No se ponga a merced de los garroteros, los comercios con afán de hacer leña del árbol caído en tiempos de contracción económica se lanzan a la caza del mejor postor y muchos inflan los precios de forma exagerada, por eso no baje la guardia cuando sale a comprar.

Tener plata en mano no implica dejar que le metan gato por liebre, eso jamás.

Los consumidores tienen una responsabilidad de medirse al momento de adquirir artículos, pero también los empresarios, pues comercialmente no está bien que le metan el inflador a la mercadería hay años que el MEIC reportó hasta un 200% de sobreprecio.

El comprador es quien decide dónde, cómo y cuánto desea pagar por productos de su necesidad y debe denunciar a los tagarotes ante las autoridades respectivas.

Por eso siempre es necesario hacerle mente a cada adquisición y no dejarse llevar por los festejos porque una mala decisión le traería dolores de cabeza.

Cuando se halle frente a un negocio cuyas vitrinas estén tapizadas con letreros llamativos y precios de lujo, nada le cuesta caminar un poco más, observar y consultar sobre otras marcas y sus costos, verá que el sorprendido con las ofertas puede ser usted.

Este es el momento justo para hacer un llamado de atención en el tema de las garantías, pues la normativa es clara y concisa sobre el cambio de productos y la devolución del dinero. Los comerciantes a veces se despistan y perjudican al cliente sin el menor de los reparos.

Por eso sea precavido y ordenado. No deje en manos de ajenos lo que tanto esfuerzo le costó ganarse. Denuncie a los abusadores, solo de esta forma el comercio entenderá que diciembre es un mes de abundancia económica, pero eso no implica desbordarse.

PERIODISTA: Redacción Diario Extra

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Jueves 12 Diciembre, 2019

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