Tras 5 meses de indagaciones, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) por medio de un allanamiento en Coronado detuvo al último miembro de una banda que asaltaba a choferes de la plataforma de transporte Uber.
El despliegue policial se efectuó minutos después de las 8 a.m. en la localidad de Dulce Nombre, específicamente 100 metros sur del Abastecedor Génesis en calle La Gallera.
Los agentes de la Sección Robos de Vehículos aprovecharon que el hombre de apellidos Morales Vargas, de 23 años, salía de su casa para detenerlo. Esta persona cuenta con antecedentes por robo agravado.
A Morales lo relacionan con dos asaltos perpetrados en octubre del año anterior en Moravia y Coronado.
Además dentro de la vivienda encontraron evidencia que lo ligaba con los atracos.
Walter Espinoza, director del OIJ, explicó que este individuo se confabuló con otros dos para amenazar los conductores y quitarles sus pertenencias.
“Su modo de operación consistió en que una mujer solicitaba el servicio Uber, la usaban como señuelo, una vez que llegaban al lugar de destino la esperaban dos hombres, uno de ellos el detenido, con armas de fuego le sustraían los objetos personales y el vehículo”, apuntó.
Este sujeto era el último en caer, ya que en noviembre habían arrestado a la mujer que solicitaba el servicio y al otro masculino que amenazaba a los choferes. Con esto Espinoza indicó que el caso se cierra.
Morales fue trasladado a las celdas del Ministerio Público a la espera de que le apliquen medidas cautelares.
