“Yo vi a Leo llegar con las manos despedazadas luego de venir de trabajar como albañil para ganarse una platita y poder pagar los pases del bus para ir a entrenar y eso lo hizo mucho tiempo y en jornada doble”, comentó Carmen Ledezma, madre del arquero Leonel Moreira, una mujer de fuerte carácter, pero chineadora con sus hijos y nietos.
El actual seleccionado nacional pasó por muchos sacrificios durante su infancia y adolescencia para lograr su sueño de jugar con el equipo de sus amores, el Club Sport Herediano, y aún más retos tuvo para llegar a la Selección Mayor y estar presente en un mundial de fútbol.
Su padre, Honorio Moreira, un hombre que tiene siempre una enorme sonrisa y vive orgulloso de ser el papá del arquero nacional, comentó que “Leo” tuvo que dejar sus estudios para dedicarse de lleno a su pasión futbolística, ya que, además, tenía que trabajar para costear sus viajes al Eladio Rosabal Cordero.
“Él siempre me dijo: ‘papi, yo quiero jugar en primera división y con la Selección’. Y yo siempre le decía: ‘si usted se lo propone y trabaja a consciencia lo va a lograr’.
Leo tuvo que dejar de estudiar un tiempo, pero por dicha en su etapa ya de jugador profesional se puso las pilas y sacó el bachillerato y otros títulos”, recordó su progenitor.
Por otra parte, Moreira llegó a ser el guardián de los tres palos del Herediano por un golpe de suerte, debido a que cuando lo aceptaron en las ligas menores del Team, él se desempeñaba como un mediocampista ofensivo, casi delantero.
En un partido con la cantera florense, el portero se lesionó y no tenían recambio, por lo que el cuerpo técnico optó por poner a Moreira como guardapalos y desde ese momento se enamoró del puesto y se adueñó de él.
Sin embargo, debutar con los colores rojiamarillos no fue tarea fácil para el oriundo de San Juan de Santa Bárbara, Heredia. Es por eso que su familia vive agradecida con el entrenador Salvador Ragusa, quien lo hizo iniciarse en el fútbol de la primera división.
“Había gente dentro del equipo que no confiaba mucho en Leo. Decían que no tenía el tamaño ideal y que no tenía las condiciones suficientes, pero desde que debutó, demostró que puede salvar al Herediano.
Después de que ese señor (Salvador Ragusa) lo puso, yo fui donde las personas que no creían en Leo y les pregunté: ¿No que no tenía condiciones?”, contó Ledezma, de forma orgullosa.
Otro de los capítulos que dejaron una gran huella en la vida de Leonel Moreira fue la no convocatoria a Brasil 2014. Durante toda la eliminatoria recibió el llamado de Jorge Luis Pinto y en el torneo nacional fue el titular indiscutible, excepto en las fases finales. Sin embargo, en la lista final su nombre no apareció.
“Eso ha sido lo más duro que nos ha pasado. Era mucha la ilusión que él tenía. Hasta lo habían obligado a bajar de peso con las reglas estrictas de Pinto. Nunca le dijeron por qué no fue, nosotros nos dimos cuenta de que no iba escuchando la lista por tele. Pero eso lo hizo más fuerte para llegar a donde está ahora”, manifestó su padre.
Sus familiares cuentan que “Leo” se desvive por sus hijos y a cada actividad a la que van, ellos están a su lado. También como esposo es una persona responsable y hogareña.
“Desde hace 10 años que lo conozco él es una persona muy disciplinada. No fuma, no toma y mucho menos cuando está en torneos. Los papás le dieron valores muy fuertes y él me enseñó lo que es realmente ser una familia unida”, aseguró su esposa Yuli Granados.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
CRÉDITOS: Jason Solano Herrera / Colaborador
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Sábado 16 Junio, 2018
HORA: 12:00 AM
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