El asesinato del libanés Elías Akl, abatido por sicarios en el sector de Escazú, trajo a colación el tema sobre el uso de guardaespaldas y escoltas al servicio del crimen organizado. En el caso en mención se aseguraba que esta organización criminal contaba con profesionales en la materia y asesinos a sueldo.
Pero diversas organizaciones de seguridad, grupos armados y adiestrados en tácticas militares en el extranjero, se desligan de este tipo de servicios que utiliza el hampa y por el contrario aseguran que estos se rodean de personas inexpertas y sin ninguna instrucción.
Los grupos especializados que están dando seguridad a empresarios de renombre o poderosos económicamente, cuentan con instrucción militar que los ubica por encima de los grupos criminales del país.
CERTIFICADOS
Quienes tienen instrucción militar y brindan los servicios de guardaespaldas en el país se desligan de narcotraficantes y personas dedicadas a la delincuencia.
Según indican, muchos delos que ofrecen servicios son exoficiales de la Fuerza Pública y el OIJ que han recibido adiestramiento militar que los pone en ventaja a la hora de enfrentar al crimen organizado. “En el caso de los guardaespaldas de Escazú, desconozco qué tipo de especialización tenían, pero pareciera que trabajaban en la informalidad”, explicó Juan Carlos Flores, director de la compañía de guardaespaldas, Sierra Consulting.
INFORMALIDAD
El tema de los servicios de seguridad personal se encuentra a la libre y actualmente no hay una figura jurídica que los represente.
Existe la informalidad del servicio o empresarios que capacitan a su personal de confianza, pero tambien militares costarricenses que gracias a sus capacitaciones son muy cotizados por personas acaudaladas y con necesidades específicas. “Son personas civiles que toman cursos en el exterior y se especializan en el cuido de personas importantes, curso (TMI). Hay que analizar el perfil del protegido, hay personas de dudosa reputación que no recurren a servicios profesionales como los que se mencionan”, manifestó Esteban Ruiz, administración del Grupo Portación de Armas.
DESCONOCIMIENTO
La especialización no es tema tan común como se pretendiera y aunque hay grupos preparados para brindar una contingencia privada a quienes lo requieran, la informalidad en muchos casos es recurrente y peligroso si es que se desea contener al crimen organizado.
“Los oficiales del OIJ que dan protección a víctimas, testigos y funcionarios públicos llevan una capacitación de 8 meses. Se instruyen con una preparación militar, seguimientos, resguardos, estudio de rutas y otros puntos vulnerables”, explicó Joseph Rivera, abogado penalista y especialista en seguridad.
TECNOLOGÍA
Un tema que está dando sus primeros pasos en el país es el uso de la tecnología como herramienta de contención de la delincuencia.
En la actualidad existen en Costa Rica instrumentos tecnológicos que son alternativas para quienes desean resguardar su vida o sus pertenencias.
“La tecnología bien aplicada es un instrumento eficiente para combatir el crimen organizado”, explicó Brian Sandy, consultor de seguridad.
Los expertos coincidieron en que hasta el momento no se ha identificado el fenómeno de que la delincuencia, narcotraficantes o mafias del país recurran a servicios especializados de seguridad, pero no es un factor que se descarta por parte de las autoridades.
PERIODISTA: Gustavo Retana
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Sábado 27 Mayo, 2017
HORA: 12:00 AM
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