Las quejas de muchos conductores y usuarios de las vías, debido a la falta de presencia policial en las carreteras, son constantes, igual que por la tardanza cuando hay un accidente y se debe esperar incluso más de una hora para que llegue un oficial de Tránsito.
Pero esto parece tener una explicación lógica, aunque lamentable: pese a la importancia de este cuerpo policial, en medio de muertes en carretera, la falta de recursos resulta evidente.
Así lo constata el director de este cuerpo policial, Mario Calderón, quien comentó cómo se trabaja al límite, pero no se da abasto con todas las responsabilidades.
“Tenemos un total de población policial de 763 oficiales operativos, distribuidos en seis regiones”, indicó Calderón, y amplió que estos se dividen en tres turnos diarios, o sea que hay unos 254 oficiales por turno vigilando todo el país.
2 MILLONES
DE VEHÍCULOS
Si se estuviera hablando de 20 años atrás, la situación seguramente sería muy buena, pero el volumen de trabajo con el cual se está lidiando es muy superior a lo que se tiene capacidad de atender.
Actualmente, el 42% de las personas mayores de 18 años que viven en el país cuenta con licencia y para el año pasado se tiene registro de que hay al menos 2.165.000 vehículos circulando en el territorio nacional.
“Esto nos viene a decir a nosotros que, si eso lo dividimos entre la cantidad de oficiales, nos da 3.092 vehículos por cada oficial”, señaló Calderón, eso si todos estuvieran en la calle al mismo tiempo, cosa que no sucede porque, como ya se dijo, se dividen en tres turnos.
Entonces, los más de 2 millones de carros tienen que ser vigilados por 254 oficiales por turno, lo que determina 8.557 automotores para regular por cada uno de los efectivos que se encuentren en funciones.
TIEMPO EN TRÁMITES
Pero ese número se sigue reduciendo por diferentes circunstancias que ocurren durante el día o que son obligaciones por ley; en otras palabras, mucho del tiempo de los oficiales se termina invirtiendo en trámites.
“Hay policías de vacaciones, incapacitados, policías suspendidos, oficiales de guardia, otros que deben estar en juzgados de Tránsito, hay policías que deben estar en el Cosevi declarando porque hay una impugnación de una boleta y otros que tienen que ir a capacitación”, indicó Calderón.
Y es que solo un accidente que deban atender, como promedio, requiere media hora de tiempo. Si se calcula que el año pasado hubo una atención de 91 mil accidentes, significa que los oficiales no pudieron vigilar las calles por unas 45.500 horas.
Con todo esto, esos 763 efectivos se terminan reduciendo significativamente hasta contar con unos 700 oficiales diarios que tienen la responsabilidad de velar por toda la red vial del país.
No obstante, a esto se suma otra situación: la necesidad de tener en el Área Metropolitana, durante las horas pico, 71 puntos de regulación, que resultan insuficientes.
“La efectividad para estos puntos, según nuestros cálculos, necesitaríamos 81 más, pero no tenemos el personal para poder lograrlo”, lamentó.
1.200 MÁS
“Para el 2014 se tenía un faltante de 1.161 oficiales apenas para atender las necesidades de ese momento”, recalcó Calderón. En otras palabras, tres años después, esa cifra podría llegar a unos 1.200 más.
Sin embargo, para esto se necesitan recursos con los que la Policía de Tránsito no cuenta y eso se convierte en un gran obstáculo para mejorar lo que se hace.
Para este año, el Consejo de Seguridad Vial (Cosevi) destinó ¢7 mil millones para este cuerpo policial, pero estos, por un impedimento de ley, no se pueden destinar a la contratación de oficiales.
“Hay una limitación legal para financiar salarios con ese dinero, porque son proyectos o programas lo que se pueden financiar, ahorita se está trabajando en hacer un planteamiento a la autoridad presupuestaria, como un proyecto a plazo determinado, la contratación de una cantidad de policías, por lo menos mientras pasa esta crisis que tenemos en carretera”, explicó Cindy Coto, directora del Cosevi.
Respecto a la posibilidad de una reforma legal, anotó que “hemos priorizado las reformas legales trabajando en aquellas que les permitan tener mayor operatividad en carretera, aunque la lucha de la reforma para darle recursos se tiene que dar en algún momento”.
El presidente de la República, Luis Guillermo Solís, consciente de la problemática, aseguró que buscará la manera de solicitar un presupuesto extraordinario a la Asamblea Legislativa para ejecutar una contratación.
TECNOLOGÍA ALIADA
En medio del asunto, la tecnología se convierte en una buena aliada para este cuerpo policial, porque les da herramientas a los oficiales para efectuar mejor su labor.
Y precisamente en esto se utilizan esos recursos de Cosevi, en la compra de mejores equipos y más herramientas para que las infracciones estén mejor respaldadas.
“Se hacen grandes esfuerzos para direccionar recursos a la Policía, incluso este año se cambió la forma de presentar los proyectos y más bien se presentó un programa cuatrienal que va dirigido a los motociclistas, entonces creció mucho”, aseguró Coto.
De ahí salió el dinero para adquirir una serie de equipos como los dispositivos para medir velocidad y las cámaras que semanas atrás se anunciaron.
BUENOS RESULTADOS
Pese a las limitantes, el Director destacó que se tienen buenos resultados, pues se hace un gran esfuerzo que permite salir adelante.
“Solo el año pasado se atendieron 91.392 accidentes, se confeccionaron 262.602 infracciones, se detuvieron 7.112 motos, 1.300 vehículos, 87 de carga, 163 bicicletas”, enumeró Calderón.
Con estos números, la situación es manejable, pero se hace urgente tomar medidas, porque ya hay una cantidad de muertes y accidentes en las carreteras que comienza a preocupar.
Un ejemplo de esto es que, en promedio, durante 2016 murió en carretera un peatón cada seis días, pero en lo que va de este año falleció una persona que transitaba a pie cada tres días, lo cual advierte que ya no se está dando abasto.
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CRÉDITOS: Fotos: Herbert Arley
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Lunes 27 Febrero, 2017
HORA: 12:00 AM
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