Oficiales de la Policía de Control de Drogas (PCD) confirmaron el primer caso de venta comprobada de ketamina como droga recreativa y desarticularon una red narcomafiosa que ofrecía a los adictos este tipo de sustancia.
La ketamina es un anestésico de uso hospitalario y veterinario utilizado en el mundo entero y los efectos de dicha droga son variados y cubren una amplia gama de posibles y diferentes estados alterados de conciencia.
Puede provocar desde una leve embriaguez hasta severos problemas de salud, incluso la muerte de la persona consumidora.
La Fuerza Pública y la Policía de Fronteras han decomisado en los últimos dos años diversas cantidades de este medicamento (tanto en la frontera norte como en el cantón central de San José y en Goicoechea), sin embargo es hasta ahora que las autoridades antinarcóticos dan y desarticulan una red -la primera- dedicada a la venta indiscriminada de este peligroso estupefaciente.
De acuerdo con informes confirmados por las autoridades antidrogas, esta banda operaba en las cercanías de una escuela en Los Cuadros de Purral de Goicoechea y traían la carga desde Nicaragua, según etiquetas.
Tras seguimientos y vigilancias, la PCD allanó un domicilio donde detuvieron a dos hombres de apellidos Otárola y Marín, así como a una mujer de apellido Chavarría, quienes conformaban la red dedicada a la comercialización de cocaína, marihuana, crack y ketamina, la cual ofrecían en polvo.
Esta última droga tiene las mismas propiedades de la cocaína y regularmente sus consumidores la utilizan en medidas de 50 y 100 cc, según la policía.
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Fuentes confidenciales mencionaron a DIARIO EXTRA que la droga viene ingresando a nuestro país como producto nuevo para consumo recreativo, pese a que es un analgésico que se utiliza para operar animales.
También es considerada como “Morfina Tecno”, cuyo consumidor experimenta hipersensibilización sensorial, así, por ejemplo, la persona se ve así misma sin tener un espejo y se sienten volar, además de pasajes alucinógenos.
Esta mortal droga puede consumirse vía oral, nasal e inyectada y cada gramo tiene un precio de ¢5 mil, mientras que el frasco alcanza los ¢25 mil, sin embargo, deben hervirlo para pasarlo de líquido a sólido (polvo) donde con una navajilla lo cortan.
LABORATORIO SURTIDO
Otárola, alias “Ocho polvos”, de 30 años, registra antecedentes por robo agravado, infracción a la ley de psicotrópicos y portación ilegal de armas; en cuanto a sus cómplices, estos no cuentan con antecedentes judiciales.
Acerca de Chavarría (56 años), trascendió que es la mamá de Marín, de 24, quienes permanecen a la orden de un Juzgado y aguardan por las medidas cautelares, podrían enfrentar una condena de hasta 15 años.
Los agentes decomisaron en el inmueble 30 dosis de ketamina en polvo y tres frascos de vidrio con 110 miligramos cada uno, 322 dosis de marihuana, 130 dosis de cocaína y 7 dosis de crack.
La PCD incautó, además, a esta red de narcos, ¢1 millón 36 mil y $30, así como una pistola y un revólver, y municiones de diverso calibre.
Los sospechosos tenían en su poder dos chalecos antibalas y una variedad de implementos para la preparación de las dosis de ketamina, cocaína, crack y marihuana.
Según la policía, este grupo tenía al menos 2 años de operar, donde “Ocho polvos” le daba la mercancía a la mujer y su hijo, quienes tenían acaparado el mercado, le vendían a cualquiera y podían consumir en la casa o bien comprar e irse.
