El tope: patrimonio cultural inmaterial
Lic. Miguel Fajardo Korea*
La Municipalidad de Liberia promulgó un reglamento para regular la tradición del tope de toros. Asimismo, con el aval del Ministerio de Cultura, se decretó como Patrimonio Cultural Inmaterial de Guanacaste, según decreto número 38426-C, de fecha 1-3-2014, publicado en La Gaceta 134 del 14-7-2014, de tal forma que esa festividad tiene declaratoria de interés público.
Se considera que dicho patrimonio “son los usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas -junto con los instrumentos, objetos, artefactos y espacios culturales que les son inherentes- que las comunidades, los grupos y en algunos casos los individuos reconozcan como parte integrante de su patrimonio cultural que se transmite de generación en generación y es recreado constantemente por las comunidades y grupos en función de su entorno, su interacción con la naturaleza y su historia, infundiéndoles un sentimiento de identidad y continuidad y contribuyendo así a promover el respeto de la diversidad cultural y la creatividad humana”.
Liberia tuvo su origen en el contexto histórico, social y económico de las haciendas ganaderas, a mediados del siglo XVlll. En ese espacio, el tope de toros es una de las tradiciones más arraigadas, que tiene lugar cada año, con ocasión de las fiestas cívicas, por celebrarse la última semana de febrero y la primera de marzo.
Dicha tradición consiste en el ¨tope¨ que se realiza, a la altura del Puente Real.
Al mediodía, los toros, traídos para ser montados en las fiestas, son entregados por el mandador de hacienda, al mandador de toros de la Comisión de Fiestas, para dar inicio al tope, en un recorrido por la ciudad hasta el toril, acompañados de la banda musical y mascaradas, con la custodia de numerosos caballistas, con una enorme asistencia de público.
En la misma línea de la recuperación de los elementos de la tradición, el tope se acompaña de expresiones musicales, festivas y gastronómicas locales; así como artesanales, propias de la talabartería, tal es el uso de albardas, pellones y otros aperos, esta tradición forma parte de la cultura viva e identidad de los liberianos.
En ese orden, la Asociación para la Cultura de Liberia (1986-2017) obtuvo una beca taller del MCJ, a efecto de definir los lineamientos para unificar criterios de tradición para el tope de toros, con el objetivo de establecer una normativa para el Concejo, que debe respetarse por parte de los entes públicos relacionados, para salvaguardar, revitalizar y proyectar este Patrimonio Cultural Inmaterial, de manera que se fortalezca la identidad histórico-cultural de Liberia.
La Unidad de Audiovisuales de la Universidad Estatal a Distancia, realizará un documental sobre el tope de toros.
La Diana, el tope de toros, las montaderas y la burra son las tradiciones más importantes de las Fiestas Cívicas de la “Ciudad Blanca”.
La tradición del tope de toros, consiste en el ¨tope¨ o encuentro del pueblo, representado por los fiesteros, a caballo, o a pie, los payasos, la banda musical o las cimarronas, con los toros traídos de las haciendas, a la altura del Puente Real, sobre el rio Liberia, a las 12:00 m.d. Así inicia el arreo de los toros por el Centro Histórico, compuesto por cuatro barrios: Condega, La Victoria, Los Ángeles y Los Cerros, y en el marco de la arquitectura de tierra, propia de Liberia, conformado por diversos sitios declarados patrimonio arquitectónico.
La música, propia del tope de toros, es la de banda o de cimarrona, así como la música de marimba. Interpretan los cuatro ritmos propios de esta tradición, a saber: a) La parrandera, ritmo propio de Guanacaste; b-danza;
c) La Contradanza, que tiene los dos ritmos, parrandera y danza o, al contrario, en un mismo tema musical; d) La Jota, ritmo de origen español con algunas variantes que se agregaron en Guanacaste. Los grupos de marimba acompañan al tope de toros desde el Puente Real hasta el toril de la Plaza Camilo Reyes, apostados a ambos lados de la calle, interpretan música guanacasteca.
La vestimenta propia del tope de toros es la camisa blanca y pantalón caqui o blanco.
Lo propio es usar el atuendo del sabanero con el caballo de trabajo: sombrero de dril o lona blanco, caqui, gris o similar con su respectivo cordón de crin o similar. Para el traje de fiesta, lo propio es usar el sombrero de dril o lona, de color blanco, caqui o similar o pita.
Este lineamiento inició durante el 2016. La reina y sus acompañantes deben usar el traje típico de Guanacaste: enagua de seda, camisola, gola, relicario, rebozo y peinado.
El último día de fiestas se integra ¨La burra¨, la tradición de pasear una bestia por la ciudad, con aperos viejos y ¨tarantines¨; se recolecta contribuciones en dinero o especie, de no ser así, el ciudadano debe ser montado y paseado en la burra, cuya presencia se advierte con el toque de una corneta.
La tradición del tope de toros estimula la artesanía del cuero y la crin, la música regional, la literatura vernácula, representada por leyendas, tallas, bombas, retahílas, costumbres y tradiciones de Guanacaste dentro del mágico lenguaje del grito y la bombeta…
Los 28 artículos de dichos lineamientos están en vigencia, y este año es otra ocasión de ponerlos en práctica, para fortalecer la tradición y la identidad, sin ninguna clase de rubor o de vergüenza, como sucede con quienes “ni pican leña, ni prestan el hacha”, como sentencia el pueblo.
*Premio Nacional de Promoción y Difusión Cultural
@mifajak
