Es competencia propiamente de la Municipalidad

En la edición del martes 10 de marzo del presente año, se consignó en DIARIO EXTRA un titular que relacionó a la suscrita Alcaldesa Municipal, con un supuesto procedimiento disciplinario aprobado por los miembros del Concejo Municipal, por lo cual resulta imperante aclarar lo siguiente:

En ningún documento la Contraloría ha indicado que pueda otorgar un aval a la partida de la escala salarial que se incluyó en el Presupuesto 2015 y que fue aprobado por los mismos Regidores del Concejo Municipal, y menos aún que dicho aval dependa de un "estudio de todas las escalas salariales", más bien ha sido enfática en indicar que este no es un tema de la Contraloría, dado que dicha justificación es competencia propia de la Municipalidad y se realiza en estricto apego al artículo 122 del Código Municipal.

No existe, ni puede existir, relación directa entre la escala salarial que rige a una Municipalidad y el salario que devenga el Alcalde o la Alcaldesa, por cuanto el Código Municipal es claro en indicar en su artículo 20, un método de cálculo único y diferenciado para este puesto de elección popular. Es importante indicar aquí, que el presupuesto 2015 el cual dio origen a la Escala Salarial, debió ser y fue aprobado por el Concejo Municipal y no por la Alcaldesa, ya que esto es competencia única e ineludible de dicho Órgano Colegiado.

Resulta comprensible de las facultades y potestades que reviste un Concejo Municipal, que pueda este constituir un procedimiento administrativo para realizar alguna investigación que considere conveniente en cualquier momento, más dicha potestad no le alcanza para realizar un proceso disciplinario contra la Alcaldesa Municipal, como pretende indicar el titular de DIARIO EXTRA. Es indispensable recordar la Sentencia del Tribunal Contencioso Administrativo con motivo de la causa llevada en el expediente judicial 14-08838-1027-CA en donde textualmente se indicó: "... por ende, los actos tendentes a ejercer la potestad disciplinaria por parte del Concejo Municipal sobre el Alcalde o viceversa, adolecerán de un evidente y manifiesto vicio de incompetencia, dado que no existe relación jerárquica entre ambos".

En cuanto al tema de la implementación de la nueva escala salarial, ésta se anuló por un acuerdo del Concejo Municipal, mismo que actualmente se encuentra impugnado mediante varios recursos, sin embargo respetuosa del acuerdo tomado, en mi calidad de Alcaldesa, ordené la suspensión de la escala a partir del mes de enero.

Por otra parte se dice en el artículo que la Vicealcaldesa renunció a su aumento salarial, pero no indica que la renuncia fue realizada en fecha posterior a la suspensión, es decir ya no se estaba implementando la escala; la solicitud fue contestada por parte de la Asesoría Jurídica Municipal, y se le indicó a la Vicealcaldesa la imposibilidad de renunciar a parte de su salario, por cuanto el mismo representa un derecho irrenunciable.

Por último, para la suscrita no es de extrañar que al estar próximas las elecciones cantonales y al existir intereses políticos en varios de los miembros que integran el Concejo Municipal, estos aun conociendo claramente sus facultades y limitaciones quieran tomar acuerdos que claramente resultan ilegítimos y carentes de sus competencias como regidores, tal es el efecto que sobre la actuación ilegítima del Concejo Municipal con referencia a este tema ya pesan varias diligencias judiciales al respecto y dado que como ciudadana me asiste el derecho que me da la Constitución, el mismo se ejercerá en el momento que oportunamente se requiera.

Así las cosas, conociendo los derechos que la Constitución Política de Costa Rica concede a todos los habitantes de la República, le solicito respetuosamente se aclare como derecho de rectificación y respuesta que el acuerdo municipal indicado en el titular de DIARIO EXTRA edición del martes 10 de marzo del presente año, no tiene relación alguna con mi persona y más bien carece de fundamento legal.

*Alcaldesa municipal Pérez Zeledón

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Lunes 16 Marzo, 2015

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Vera Violeta Corrales Blanco*