La Ley a su alcance

La hipoteca es un contrato civil que respalda el pago de una deuda. Se debe tener en cuenta que las hipotecas pueden llevar una trampa escondida, a pesar de que no existe para engañar. Como cualquier deuda, también tiene los elementos básicos de una obligación: un deudor que se compromete a pagar (el deudor), una suma concreta a pagar (el plazo) y los intereses.

A pesar de que la deuda tiene un plazo que puede ser de meses o años, ahí surge la confusión que puede tener un triste desenlace. Por ejemplo, los préstamos bancarios, de mutuales, asociaciones o fondos de ahorro y garantía para financiar una casa tienen plazos largos.

Como los lotes o viviendas en general tienen un alto precio, el préstamo normal andará con un plazo de 15 años, aproximadamente. Ese plazo se conviene antes de la formalización. Como el plazo es prolongado, el costo del crédito sube por el pago de intereses.

Normalmente un préstamo para compra de casa termina siendo tres veces el monto del capital inicial. Esto no debe asustar a nadie porque después del tercer o cuarto año de pagar muchos intereses y poco abono al capital empieza a revertir el pago, que se convierte en una mensualidad parecida a un alquiler.

Como la hipoteca tiene un plazo fijado, generalmente en años, algunos deudores pueden confundirse, creyendo que gozan de tiempo para pagar, pero nunca deben olvidarse de un detalle: con solo fallar un mes de pago la totalidad de la deuda está vencida. Así se determina en la escritura de constitución.

Por lo tanto, el atraso de un solo día significa un mes de atraso, y si el acreedor es poco tolerante puede sacar la casa a remate. El acreedor (banco, mutual o particular) nunca tiene la obligación de aceptar pagos tardíos y eso no lo hace una mala persona.

En este caso, un atraso de ¢200 mil del pago mensual, por ejemplo, puede dar por vencida la totalidad de la obligación, incluso a los cuatro o cinco meses.

Ahí está la trampa, considerar que el plazo de la hipoteca está a 15 años, cuando en realidad todo mes que corre es un nuevo plazo para pagar o caer en mora, para estar al día o para enfrentar un cobro judicial y remate. Y por pagos absolutamente manejables.

Concluye mañana.

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Lunes 30 Diciembre, 2013

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Por: Lic Gerardo Morales