Óscar López, candidato presidencial del Partido Accesibilidad Sin Exclusión (PASE), llegó a la cima del Cerro Chirripó tal y como se lo propuso. Tras su aventura, asegura que aprendió a redoblar esfuerzos, pues en medio de la tregua electoral quiso apostarle a un reto distinto. López no sabe cuál rumbo tomará su campaña a partir de enero, pero está consciente que la perseverancia al escalar el cerro más alto de Costa Rica, le servirá para seguir trabajando fuerte, con miras a una posible llegada a Zapote.
El aspirante a ocupar la silla presidencial dijo que dedica su caminata a las personas con discapacidad y los adultos mayores. A pesar de estar contento, descartó volver a vivir la aventura.
“Al llegar a la cima, elevé por todo lo alto la bandera del PASE, esta fue la primera vez que subí el Chirripó, duré tres días, pero creo que será también la última, solo si mi hijo Ramses me lo pide volvería a subir. Cuando uno está arriba, le falta el oxígeno y a mí las rodillas no me daban más”, dijo López a DIARIO EXTRA.
Entre las experiencias que vivió está el haber tenido de cerca un pizote, asimismo, mandar una foto desde la montaña al Periódico de Más Venta en Costa Rica.
“Me tragué un mosquito de montaña en el recorrido, fueron tres días de caminar junto a mi amigo de infancia, Humberto Campos, y el psicólogo Huanelge Gutiérrez; también, nos acompañó José Luis Garita, un guía montañero”, manifestó el candidato presidencial.
López narró que tras el recorrido tiene una lesión, pues se le estiró un ligamento de la pierna izquierda, pero está satisfecho de haber logrado su objetivo.
