Marisol Arias Obregón fue una de las jugadoras de Curridabat Futsal Venus que celebró con un sentimiento especial el título de campeón días atrás, luego de vencer en la final -de la liga de primera división- a Alajuela. Una lesión hace dos años por poco le corta de manera prematura su carrera en la disciplina y además enfrentó algunos obstáculos antes de aterrizar en Venus.
En medio de los festejos, a Sol -como la llaman- ni por la mente le pasaba que con ese galardón se convirtió en la jugadora más ganadora del fútbol sala femenino costarricense.
Arias Obregón sumó cuatro cetros, tres de ellos los consiguió con el equipo de sus amores, Alajuela, en 2010, 2012 y 2014. Y el que obtuvo con Venus recientemente en este 2017.
Además, contabiliza otro título con Alajuela en 2007 antes de la fusión del fútbol salón con el fútbol sala.
La oriunda de Turrialba fue determinante en la final, contribuyendo con gol y asistencias para encaminar a su equipo, que perdió el juego de ida 4-2, pero se repuso en la ida con un marcador de 9-2 para levantar la copa.
“Es un dato que me tomó por sorpresa, porque nunca espero que me pasen esas cosas, porque siempre me he considerado una jugadora promedio, considero que hay muchas mejores que yo y que tienen más nombre. Que me haya pasado a mí es algo bonito y también es una motivación extra, ahora tratar de seguir ganando y que sean muchos más”, dijo a DIARIO EXTRA la jugadora, quien además es seleccionada nacional.
Sol se caracteriza por tener una buena zurda y ser una guerrera dentro de la cancha; de hecho, ella misma se define como un peón. Ha sido regular en los equipos que ha estado, como Alajuela y Venus, además de la Tricolor.
De hecho, con la Sele tiene el distintivo de haber escrito su nombre en los libros de la historia al ser la primera jugadora en marcar en el primer Torneo Mundial de Futsala Femenino Portugal 2012, a la selección de Rusia.
SUS INICIOS
Sol Arias cuenta que desde niña se vio atraída por el futsal, y aunque al inicio no contó con el apoyo de sus padres, se mantuvo firme en la disciplina. Integró el equipo de la escuela, igual que el combinado de Juegos Nacional de Turrialba y la segunda división de Turri. Antes de dar el salto a la división de honor con Alajuela, donde llegó en 2007 y se mantuvo hasta 2016.
Una seria lesión en octubre de 2015 la llevó a pesar seriamente dejar el futsal que tanto ama. La jugadora de 28 años sufrió roptura de ligamento cruzado anterior y la recuperación fue lenta y dolorosa. Estuvo en terapia con su equipo y en la Federación Costarricense de Fútbol (Fedefútbol).
En diciembre del año pasado decidió que requería nuevos retos, por lo que dejó a Alajuela y se fue a la Universidad Nacional, donde no le fue nada bien. En ese momento recibió la llamada de Alberto Mora, técnico de Venus, quien la invitó al proyecto. Ahí la ingeniera industrial tuvo un segundo aire.
Arias Obregón le retribuyó la confianza al entrenador con entrega, sacrificio y liderazgo.
Cabe destacar que Alajuela, rival al que venció Venus en la final, es el equipo que más finales ha disputado desde la fusión: 2010, 2011, 2012, 2013, 2014 y 2015. Solo no disputó las de 2009 y 2016.
