El guanacasteco José Antonio Corea, abogado y presidente del Movimiento Autónomo de Guanacaste, elevó a la Sala Constitucional el caso del exdiputado Ronal Vargas.
Corea apela a los magistrados a dar curso al amparo, señalando como primer hecho que Vargas fue elegido por el pueblo guanacasteco y “ha sido obligado a renunciar por la cúpula del partido Frente Amplio, en las personas de José María Villalta, Gerardo Vargas y Patricia Mora, purga que seda por presuntas acusaciones de acoso sexual cometidos por una compañera sentimental del aquí representante popular Ronal Vargas”.
Corea asegura que el presunto acoso se basó solo en chismes y viola los principios del Estado de Derecho del país.
COACCIÓN
“No es más que una purga del Frente Amplio matizada por incomodidades con la forma de ser del legislador, por ser demasiado independiente de la línea comunista, pues él se debe como legislador a los intereses del pueblo guanacasteco, que fue el que lo eligió, y esto no es más que reminiscencias de dictaduras de fascismo rojo, donde hay ausencia de democracia”.
El abogado alega que la renuncia de Vargas debió someterse a votación en el plenario legislativo, según el artículo 121 de la Constitución Política.
“El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) no tiene competencia para la interpretación de la Constitución, sólo tiene competencia para la interpretación de las leyes relativas a procesos electorales. La renuncia de un diputado no es asunto que le corresponda ver”, señala el recurso.
DE VUELTA AL CONGRESO
Este amparo se suma al recurso que presentó el propio Vargas ante el TSE denunciando que fue coaccionado para dejar su puesto en el Congreso y por eso se le debe devolver su curul.
El Frente Amplio presentó su defensa esta semana ante el TSE negando presión al legislador y resaltando pruebas contundentes que evidencian el acoso.
La presunta víctima, la abogada de apellido Araya, denunció a Vargas ante el Juzgado de Trabajo.
