Editorial
Definitivamente pensar en que la paridad de género podría verse consumada en casi un centenar años es poco alentador, más cuando las féminas han hecho mil intentos por largos periodos para alcanzar sus derechos y verse protagonistas en un mundo que predominan las corbatas, el cabello corto y la voz ronqueta.
El último estudio del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) revela que sería hasta dentro de 81 años, léalo bien, que las mujeres puedan alcanzar igualdad en su máxima expresión con los varones.
La investigación se hizo en 142 países del orbe, en el que Islandia logró posicionarse en el primer lugar tras implementar cambios radicales que favorecen el desarrollo de las damas en ámbitos como el político, económico y la salud.
Este lugar localizado en el extremo noroeste de Europa es el país más igualitario del mundo y según la novena edición del informe, Yemen es el de mayor desigualdad.
De acuerdo con el ranking, en segundo lugar están Finlandia, Noruega, Suecia y Dinamarca, pero cabe destacar que pese a los esfuerzos ninguno logró cerrar la famosa brecha, es decir sigue existiendo algún porcentaje de desventaja femenina.
Pero el Foro hizo un descubrimiento que merece ser mencionado y destacado, en el sexto puesto de este estudio se ubica nuestro vecino del norte.
Nicaragua logró meterse entre los países más desarrollados en la materia y demostrar que el cambio en las políticas públicas conlleva a buenos resultados.
Textual indica el documento que ya circula a nivel mundial: “Nicaragua, por ejemplo, consolida su posición como líder en paridad de género en América Latina y el Caribe, gracias a su sólido desempeño en las brechas de la salud, educación y política”.
Estas palabras son alentadoras y dejan en evidencia al resto de vecinos de América Latina que siguen pensando con barba y bigote, que no logran abrir espacios para las mujeres en tomas de decisión , no solo en el sector público sino también en lo privado.
Costa Rica no desciende, está en el puesto 32 en calificaciones del ranking de educación, mientras que en política la nota es de 48.
En la lista están Perú, vale indicar, que pasó de la posición 80 a la 45; Chile, del 91 al 66; Argentina, del 34 al 31.
De las principales economías de Europa, Alemania se encuentra en la posición 12, Francia en la 16, mientras que el Reino Unido cae ocho lugares hasta el sitio 26.
Las diferencias entre hombres y mujeres siguen siendo más que evidentes, nuestro país no escapa a esa realidad y hace falta mucho por hacer.
Las cifras indican que en Costa Rica las mujeres pueden llegar a ganar hasta un 27% menos que los hombres, aún ocupando el mismo puesto, situación que a todas luces es discriminatoria.
Pero no vayamos tan lejos, para lograr espacios de participación se necesitó una normativa que estableciera el tema de las cuotas, siendo esto un éxito, pero hoy en el siglo XXI más parece un clamor de piedad que una oportunidad alcanzada con esfuerzo.
Datos de la Universidad Nacional muestran que en el ámbito privado, la fuerza de trabajo masculina dobla prácticamente a la femenina, en números reales son 1.086.701 varones contra 592.836 damas.
Solo cuatro de cada diez mujeres están ocupadas actualmente y se indica que pese a superar a los caballeros en educación universitaria, el desempleo femenino llega hasta a un 10%, mientras que para los hombres corresponde a un 6%.
Pero ante esta situación, ¿qué estamos haciendo?, parece que poco o nada, pues quedar por debajo de países con menores condiciones sociales nos indica que es urgente revisar las políticas públicas en torno al tema de la equidad de género.
Lo que dice el Foro nos obliga a entrarle duro al asunto y no dormirse en los laureles, pues cuando veamos estaremos en el cucurucho de la lista.
Ojalá no pasen tantos años para que las mujeres no tengan que verse por debajo del hombro masculino.
