Los empresarios del sector turístico aún no ven los resultados de la gestión de Wilhelm von Breymann, a casi tres meses de su asumir como titular de Instituto Costarricense de Turismo (ICT).
Von Breymann se reunió ayer con representantes del sector para exponer su plan de trabajo en el Club Unión, en San José.
En ese sentido los cambios tan esperados por los empresarios aún no se ven. Pablo Abarca, presidente de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur), afirmó que se mantiene la apertura hacia el sector.
“El Ministro hizo un punteo del Plan Nacional de Desarrollo, dentro del cual está incluido el sector turístico y sus prioridades. Lo más importante es que él tiene total anuencia a conversar con el sector y a través de la Cámara él va a tener esa línea de comunicación”, explicó el presidente de Canatur.
Abarca considera que hay un reforzamiento de pauta y una continuidad de la oferta internacional, perspectiva que deja claro que el principal detalle del gobierno actual es el tema del Consejo de la Competitividad, el cual Von Breymann presidirá con los demás ministros para agilizar muchos de los trámites en materia turística.
Agregó que esa es la esperanza del sector para que se haga un incentivo de la actividad turística con políticas públicas fuertes, aunque acepta que por ahora lo que se ha visto es la negociación que se abrió con tres aerolíneas en Europa para viajar a Costa Rica.
El papel del ICT es indispensable en la promoción del país como destino turístico en el extranjero, además de la capacitación del personal, especialmente en nichos de mercado nuevos.
“Sabemos que él tiene que acomodarse, no ha sido funcionario público, por lo que debe mejorar y aprender en muchos aspectos, pero consideramos que lo más importante es la voluntad y él la tiene”, afirmó Abarca.
La industria del turismo representa el 20% del total de las exportaciones y el 8% del Producto Interno Bruto (PIB).
Las repercusiones de la crisis financiera, la contracción del mercado europeo y factores internos como el comportamiento del tipo de cambio y la pérdida de competitividad provocaron que el turismo viviera un periodo de incertidumbre durante los últimos años.
La nueva administración no ha presentado resultados tangibles ante los empresarios, pero ellos se mantienen a la expectativa sobre cualquier cambio positivo que mejore los condiciones en que trabajan actualmente.
