Londres. (EFE) - Una viuda británica ganó una batalla legal en el Tribunal Superior de Londres para que no se destruya el esperma congelado de su marido, fallecido de cáncer en febrero de 2012.
Beth Warren, fisioterapeuta de 28 años, inició el proceso el 4 de diciembre cuando llevó ante la justicia a la Autoridad de Fertilización Humana y Embriología británica.
La HFEA había establecido que el esperma congelado de su esposo, Warren Brewer, se destruiría en abril de 2015, si ella no decidía antes. Un nuevo proceso le dio la razón y podrá concebir cuando lo desee.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Sábado 08 Marzo, 2014
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