Un informe del Centro de Estudios del Negocio Financiero e Inmobiliario (Cenfi) apunta a que cada vez hay más dificultad para comprar una casa en Costa Rica.
Esto ha obligado a un mayor número de hogares a tener que alquilar, dado que sus ingresos no dan para la adquisición de una vivienda propia, situación que se agrava en las zonas rurales.
La presentación del Informe Radiografía de la Vivienda 2022 estuvo a cargo de Melizandro Quirós, director del Cenfi, quién señaló que en último año hubo una baja en la capacidad para adquirir una casa para clase media.
En promedio, adquirir una casa se ha vuelto hasta un 6,43% más caro con relación al 2021, ante el aumento en los costos y la caída en el ingreso. El precio medio pasó de los ¢59,8 millones a los ¢63,7 millones.
De esto modo, la cuota para pagar al banco subió unos ¢62 mil entre un año y otro. Esto implica que las familias tendrían que dedicar una mayor parte de sus ingresos para cubrirla.
Quirós explicó que esto significa que comprar una vivienda en zonas rurales o alejadas puede resultar hasta un 40% más barato en la Gran Área Metropolitana.
Se dice que a una familia en la Región Brunca con un ingreso de ¢672 mil le alcanzaría para comprar una casa de ¢37 millones pagando una cuota de ¢269 mil por mes en promedio. Algo similar pasa en la Región Huetar Caribe.
Entretanto, en la Región Central, alcanza para comprar una vivienda de ¢65 millones con un ingreso mensual de ¢1,1 millones y pagando una cuota de ¢473 mil por mes.
CAEN VIVIENDAS FINANCIADAS
Del estudio se desprende que, en seis años, el parque habitacional de Costa Rica aumentó en 214 mil viviendas, para un 14,9%.
En este período, lo que más creció es lo que llaman la vivienda totalmente pagada, donde hay un componente del Banco Hipotecario de la Vivienda (Banhvi).
En segundo lugar, está la vivienda alquilada y lo que más destaca es la caída en las viviendas financiadas. Esta disminuyó en 6.507 unidades.
“Eso no significa que no se este dando crédito, sino que el neto entre las mayores viviendas financiadas y las que se repagaron, fue mayor esa última y por eso el resultado es negativo”, acotó Quirós.
En cuanto a las viviendas alquiladas, el número aumentó en 24 mil unidades a lo largo de seis años. Se pasó de 263 mil viviendas alquiladas a 288 mil.
Sin embargo, en el 2022 ocurrió un fenómeno, ya que las viviendas alquiladas pasaron de 288 mil a 313 mil. Esto implica que, en solo un año la cantidad de alquileres creció en 25 mil unidades, casi lo mismo que había tomado seis años.
“Antes veníamos creciendo en 4 mil viviendas por año, y solo en el 2022 aparecieron 25 mil unidades de viviendas en alquiler”, dijo.
PERIODISTA: María Siu Lanzas
CRÉDITOS: Foto: Archivo
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Sábado 18 Marzo, 2023
HORA: 12:00 AM
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