Como favorable para los hampones, así describe el panorama el criminólogo Gerardo Castaing, tras la reciente masacre que cobró la vida a 6 personas que se encontraban en una vivienda en la localidad de Buenos Aires de Puntarenas.
El pasado 19 de octubre, un grupo de personas estaba en la propiedad de un extranjero cuando fueron atacados mortalmente con arma de fuego y, algunos de ellos, calcinados.
No fue hasta que el padre de una de las víctimas se acercó al sitio que se supo de la situación y se hallaron los cuerpos en dichas condiciones, ubicados en diferentes partes del lugar y con rastros de violencia.
Cabe mencionar que el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) aún se mantiene en la fase de indagaciones, con el fin de esclarecer el crimen, por lo que Castaing dijo que este proceso podría revelar datos conforme se desarrolle el caso.
“Son procesamientos que se hacen muy despacio, muy analíticamente, entonces, se utiliza la observación como un escrutinio mental, activo, dirigido por la inteligencia, ya que se está hablando de situaciones complejas de cadáveres y por la forma en que los ultimaron”, explicó.
HIPOTESIS
Entre lo detallado por el criminólogo, habría varios escenarios que girarían entorno a lo sucedido tras la masacre, en los que resaltan puntos de análisis como el hallazgo de los cuerpos que fueron quemados.
“Analizando la conformación de este escenario, para que fuese un robo normal o un asalto, no se justifica la muerte de las personas, mucho menos se justifica que calcinaran cadáveres. Si establecemos una hipótesis, podríamos hablar de que mataron a estas personas para evitar la responsabilidad penal de los autores del hecho, evitar que fueran reconocidos”, explicó.
Por su parte, Castaing dijo que este método de muerte podría generar suposiciones de que, durante el ataque, el grupo intentaba obtener información de interés para los hampones.
“Lo que llama la atención es que calcinaran los cadáveres porque no tiene sentido, muchas veces se utiliza la combustión de un cadáver utilizando acelerantes para que otras personas que está vivas vean el sufrimiento y la tortura que está sufriendo la víctima para obtener información de algo. Es una hipótesis de que los calcinaron para obtener información de algo que les interesaba y utilizaron este método”, señaló.
VIOLENCIA EN AUMENTO
Por su parte, el experto dijo que estos casos estarían generando patrones que conllevan el posible aumento de hechos violentos.
“Hay una degradación en la forma de comportamiento de las personas, y principalmente en los criminales, en el sentido de ir utilizando más violencia.
El Gobierno está centrado en desarmar a los ciudadanos que tienen armas de forma legal, pero no está haciendo lo posible por desarmar al hampa, que se puede mover por donde quiera, puede disparar cuando quiera, el narcotráfico estableció una pena de muerte casi que desde mediados de los años 90, donde matan a quien quieran, deciden dónde, cuándo y cómo matan”, recalcó.
Según Castaing, las aparentemente pocas acciones por parte del Ministerio de Seguridad, además, estarían ocasionando la existencia de una zona de confort de los hampones para tomar estos lugares o para realizar actos en donde la violencia cada vez sea mayor.
“Esta situación hace que la violencia sea de fácil utilización por parte del hampa y la falta de prevención por parte de la Fuerza Pública, hace que estos encuentren un país de confort para desarrollar toda esta violencia. Un panorama totalmente favorable para ellos, una zona de confort para el hampa y para el narcotráfico”, enfatizó.
AUTONOMÍA
Asimismo, el criminólogo recalcó la necesidad que tiene la cartera de seguridad de tomar decisiones y poder parar dichos eventos en el país.
“El Gobierno que quede va tener que escoger bien al ministro de Seguridad Pública, en el sentido de dejarlo trabajar. Por ejemplo, si todas las directrices vienen de Casa Presidencial hacia el Ministerio, el ministro debería tener experiencia, autonomía y capacidad en sus decisiones para que haga una restructuración del ministerio”, comentó.
Castaing indicó que actualmente se cuenta con los requerimientos para combatir la inseguridad a nivel país, sin embargo, se necesita trabajar áreas que permitan llevarlo a cabo rápidamente.
“El ministro actual tiene las capacidades, entonces, sencillamente, si hay algo que no le sirve al Gobierno, sencillamente vienen directrices u ordenes para que se actúe, pero si no le permiten desarrollar las estructuras operativas necesarias para frenar a que el hampa ande en la calle a cualquier hora, no se va a detener. Si no hacen lo que es obvio que hay que hacer, de alguna manera se está favoreciendo”, concluyó.
PERIODISTA: Erick Melendez Delgado
EMAIL: [email protected]
Sábado 23 Octubre, 2021
HORA: 07:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA