Forjar una nación es una tarea compartida

Tinta con sentido

El Centro Costarricense de Ciencia y Cultura, Museo de los Niños, celebra el Bicentenario de nuestra independencia con una muestra de retratos de los gobernantes que, a lo largo de estos doscientos años, han contribuido con la construcción de esta nación. Los 75 retratos en mediano formato elaborados por el artista nacional Ricardo Vega ofrecen un recorrido por la historia de Costa Rica, la vida de sus gobernantes y el legado con que contribuyeron a cimentar la democracia de la cual hoy gozamos.
La historia de Costa Rica, al igual que la historia de cualquier otro pueblo, está plagada de acontecimientos en los que podemos encontrar actos heroicos, batallas, traiciones, errores, golpes de estado y anécdotas que nos recuerdan lo difícil que es levantar desde sus cimientes una nación, crear las instituciones con las cuales gobernar y administrar, impartir justicia y crear el marco legal que facilite la vida en sociedad; apoyar la generación de riqueza y su equitativa distribución, garantizar el acceso a la salud, a la vivienda, a una justa retribución por el trabajo y una vejez digna.
La historia nos permite recordar que no siempre hubo acceso universal a la educación, que solo unos pocos afortunados podían atender a las universidades, que las mujeres no tenían el derecho a elegir a sus gobernantes, que la cultura estaba al alcance de unos pocos, que la caridad era la respuesta para los desposeídos y que la democracia es frágil.
Con errores, equivocaciones y aciertos se ha edificado un país extraordinario que descansa sobre los pilares de una democracia que está en permanente construcción. Una democracia que depende de los valores y principios de sus gobernantes y gobernados; una democracia que se fortalece con la participación de los ciudadanos y que exige de los actores politicos y sociales capacidad, experiencia y conocimiento para guiar los destinos de la nación.
No conocer la historia no solo condena a los pueblos a repetir sus errores, sino que les priva de la oportunidad de identificar y valorar los aciertos de quienes con su legado marcaron la diferencia, porque atrás de cada logro, de cada obra, de cada conquista, de cada decreto o ley, hay hombres y mujeres que se atrevieron a tomar riesgos, a soñar, hacer alianzas y sacrificios, a proponer cambios y hacer reformas, a eliminar injusticias y crear oportunidades.
Coincide el Bicentenario con el inicio de la contienda electoral y hoy más que nunca debemos reflexionar sobre las lecciones de la historia, sobre la responsabilidad de elegir y ser electos, pues la democracia es un ejercicio en doble vía del cual depende el futuro, la estabilidad y el desarrollo de nuestro país.
En pocos meses iremos a las urnas a votar por el próximo gobernante y los ciudadanos nos enfrentamos a una inusual oferta de postulantes que nos exige valorar las calidades, experiencia y capacidad de los candidatos quienes, por su parte, deben anteponer los intereses del país por encima de cualquier vanidad personal y estar preparados para asumir la más grave responsabilidad que un ciudadano puede tener... dirigir los destinos de su nación.
Es nuestra esperanza que esta exposición llame a nuestros visitantes a la reflexión y al análisis de estos doscientos años en los que nuestros gobernantes han forjado una nación apoyados por la ciudadanía, han luchado por enmendar los errores del pasado y han sentado las base un Estado Social de Derecho en el que la búsqueda de la justicia social y el bien común ha sido el norte. Las amenazas contra nuestra democracia siguen estando presentes, no son tan obvias como en el pasado, pero están ahí fraccionando y dividiendo al pueblo, sembrando la desconfianza y el odio, desdibujando la historia y a sus actores, menospreciando el difícil arte de gobernar con propuestas simplistas, diciendo al pueblo lo que quiere oír y no lo que deben escuchar.
La democracia no es perfecta, pero sí perfectible, de nuestro interés por rescatar las lecciones que guarda la historia, de nuestro compromiso con el proceso electoral y el ejemplo que les demos a las nuevas generaciones dependerá que nuestra democracia se fortalezca y perdure por los próximos doscientos años o sucumba ante el populismo, la incompetencia y la intolerancia.

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Sábado 16 Octubre, 2021

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Gloria Bejarano Almada