Un hombre identificado como Juan Manuel Zúñiga Sandí, de 31 años, perdió la vida tras recibir un impacto de bala en el pecho en Calle Fallas de Desamparados, San José, tras salir a comprarle comida a su perro.
Según versión de testigos, el joven se encontraba sentado frente a una casa de la comunidad cuando un carro con tres sujetos se acercó y uno de ellos arremetió la lluvia de balas, tal como lo dio a conocer DIARIO EXTRA en la edición de ayer.
EN LIBERTAD
El Periódico de más Venta en Costa Rica conversó con los familiares del occiso este miércoles, quienes se mostraron afectados ante el ataque que le quitó la vida a Juan Manuel.
Su hermana Stephanie Zúñiga adujo que el ahora fallecido estaba por cumplir un año de haber salido de la cárcel.
“Él había cambiado mucho su carácter después de lo vivido en prisión, tenía 22 días viviendo con mi mamá y conmigo. Lo que hacía era ir trabajar, visitaba la pareja, no se metía con nadie”, comentó.
La mujer de 28 años describió el momento como muy difícil porque a través de otro de sus parientes se enteró de que a su hermano lo habían plomeado.
“La que me llamó fue mi prima, ya que él intento huir, sin embargo caminó unos metros y quedó al frente de la casa de ella, quien de inmediato me hizo la llamada para contarme”, contó con ojos llorosos.
Stephanie afirmó que el hombre logró quedar con vida, intentaba hablar, movía la boca y, pese a sus deseos por sobrevivir, no lo logró.
“Mi prima vio que él se movía, lo alzaba, le hablaba; en eso llegaron los policías que nos dijeron que no lo tocáramos mientras llegaban los cruzrojistas, pero al momento en que llegaron ya había fallecido”, manifestó.
“OREN POR MÍ”
Stephanie comentó a El Periódico de Más Venta en Costa Rica que el ahora occiso, quien vivía con su madre, días atrás le pedía a su progenitora que orara por él para que no le sucediera nada malo, inclusive les solicitaba que cambiaran de casa.
“Él lo presentía, le decía ‘mami, esté orando por mí, no deje de orar, pídale mucho a Dios para que no me pase nada’. Vámonos de aquí de Calle Fallas, ya no quiero vivir aquí”, dijo el sujeto a su familia días antes de morir.
Por su parte, este medio conversó con la actual pareja de Zúñiga, Monserrat Vargas, con quien compartió los últimos años.
De acuerdo con Vargas, el masculino no tenía hijos, por lo cual le ayudó con la crianza de una pequeña, quien vio a Juan Manuel como su padre.
“Él la agarró desde los 15 días de nacida, solo papito le decía. Ahora me pregunta ‘¿papá está trabajando’”, agregó Vargas.
“Como todas parejas teníamos problemas, tenía un carácter muy fuerte, pero tenía un gran corazón”, mencionó.
Para Monserrat fue un golpe muy duro, ya que tenían proyectos como familia, incluso recién habían comprado un carro para salir a pasear y pasar más tiempo juntos.
“Cambiamos el carro por una moto, lo compramos hace poco para poder andar los tres como una familia”, expresó su pareja, quien recordaba las palabras de Zúñiga.
BUEN HIJO
DIARIO EXTRA conversó con la madre del fallecido, Vera Sandí Gamboa, quien recordó a su hijo con lágrimas.
“Era muy independiente, con un carácter fuerte, pero tenía un gran corazón, se había venido a vivir conmigo”, dijo.
Doña Vera comentó que su muchacho tenía pocos días de vivir con ella nuevamente y pese al corto tiempo de su estadía siempre cuidaba la familia completa.
“Recuerdo cuando me decía ‘mami, yo voy a cambiar, por usted lo voy hacer, no la quiero ver sufrir’. Él estaba pendiente de mí y me pedía que orara para que no le pasara nada”, expresó.
“Me agradecía todo, yo le servía café y me decía ‘gracias, ma’, cosas que para otras personas son normales, pero para mí hacen la diferencia”, acotó.
La progenitora de Zúñiga comentó que antes del asesinato de su hijo presentía que algo sucedería, una sensación que no sabía cómo expresar.
“Sentí algo y le dije ‘yo voy por el alimento del perro’, pero él me dijo que no que, él iba. Como duraba yo salí, me preocupé y comencé a preguntar, pero nadie sabía nada. En eso mi hija me llamó y me contó la terrible noticia”, narró la señora con mucho sufrimiento.
La madre tras darse cuenta de la noticia aguardó en su casa a la espera de que las autoridades del OIJ hicieran el levantamiento del cuerpo y así no tener imágenes tristes en su memoria que le causarían mucho dolor.
“No bajé, la policía no dejaba acercarse, no quería verlo con la sábana blanca, eso me dolería mucho”, indicó.
Por ahora espera que Dios haga justicia en este momento y las autoridades realicen su trabajo.
LUGAREÑOS
Vecina
“Yo lo vi fumándose un cigarro solito, me encontraba con una muchacha afuera de mi casa cuando vi que pasó un carro, se detuvo y le disparó. Vamos a organizarnos como vecinos porque nos sentimos inseguros”.
Vecino
“Yo solo escuché la detonación, pensé que era una bombeta o así, para tal sorpresa que cuando salí estaba el muchacho tirado y sin vida. Estamos preocupados porque en mi casa vivimos mi esposa, mi nieto y yo; y una bala perdida es un peligro”.
Vecino
“El muchacho estaba sentado al frente de la casa cuando le dispararon, eso nos asusta y por eso queremos irnos de aquí, queremos vender porque en los últimos años han matado a varios, inclusive a un amigo”.
PERIODISTA: Erick Melendez Delgado
CRÉDITOS: Fotos: Herbert Harley e Isaac Villalta
EMAIL: [email protected]
Jueves 04 Marzo, 2021
HORA: 12:00 AM
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