“Se acuerda: Instruir a las diferentes unidades administrativas a fin de que canalicen la entrega de la información requerida por los periodistas, a través de la Dirección Ejecutiva; esto con el propósito de mantener un orden y unidad en la entrega de esta documentación”.
La anterior es la disposición que fue avalada por los diputados Henry Mora, Jorge Rodríguez y Luis Vásquez, quienes conforman el Directorio legislativo.
Esta decisión, que tomaron en diciembre pasado, durante una sesión ordinaria, en una línea de 31 acuerdos, empieza a ser tildada como un revivir de la repudiada y popularizada “Ley Mordaza”. Hace dos años, tras la alerta del Grupo Extra, los ticos se volcaron a exigir una reforma a la Ley de Delitos Informáticos que afectaba a los medios nacionales.
La legislación pretendía sancionar con cárcel la divulgación de “informaciones políticas secretas”.
Mora, presidente del Congreso, se ha ganado el calificativo de “dictador”, tras las decisiones que desde su silla, tal es el caso del procedimiento que utilizó para la aprobación del presupuesto ordinario 2015.
ATAQUES A LA PRENSA
Las últimas semanas la prensa nacional ha sido blanco de ataques y nuevamente el Colegio de Periodistas de Costa Rica (Colper) intervino con un pronunciamiento oficial.
Esta vez la divulgación de la causa real de la renuncia de un legislador, relacionado con una queja por acoso sexual, colocó a la prensa en la polémica.
“Se ha vuelto noticia común que los políticos, sin distingos de color, o personas envueltas en casos polémicos acusen a los medios periodísticos de fabricar noticias y de manipular y tergiversar las informaciones para perjudicar a sus respectivos partidos o alguno de sus miembros.
Casi por regla estas acusaciones se hacen sin señalar a los autores de estas presuntas 'manipulaciones'; es decir, carecen de fundamento y solo cumplen con el propósito de levantar un polvorín y de paso obviar responsabilidades propias.
Al Colegio de Periodistas de Costa le preocupa la entronización de esta mala práctica de atacar al mensajero sin ninguna prueba fehaciente de que el medio o el periodista haya actuado de mala fe”, informó el Colper en un pronunciamiento oficial.
