El pago de intereses sobre la deuda es el más alto de los últimos 15 años. Al mes de marzo ascendió a ¢624.542 millones, lo que representa un 1,67% de la producción nacional.
Un 83,82% de dicho monto corresponde a compromisos con acreedores internos, es decir ¢523.520 millones se deben en casa. El resto, o sea ¢101.022 millones, a inversionistas externos.
Lo anterior hace que el hueco financiero se mantenga. El país alcanzó un déficit fiscal de ¢395.530 millones (1,06% del PIB) al primer trimestre del año, según los indicadores publicados por el Ministerio de Hacienda.
Sin embargo si quitáramos ese pago de intereses otro gallo cantaría. Por primera vez en 11 años el Gobierno central logró equilibrar los ingresos y los gastos, sin incluir el pago de intereses, lo que se conoce como superávit primario.
“Lo que esto nos recuerda es que el país tiene una deuda pública significativa y confirma la gran importancia de alcanzar un superávit primario constante a la brevedad para pagar con recursos propios la mayor cantidad posible de intereses, que muestran un crecimiento interanual del 22,08%”, explicó Elián Villegas, ministro de Hacienda.
El funcionario insiste en que no es necesario hacer una negociación forzada con los tenedores de deuda, no obstante algunos economistas creen que esto nos ayudaría a llegar antes a la meta y liberar recursos para otros fines.
Villegas recordó la importancia de la aprobación del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y los préstamos de apoyo presupuestario que se encuentran en discusión en la Asamblea Legislativa para no echar marcha atrás en lo que se ha alcanzado.
A marzo de 2021 la deuda del Gobierno central ascendió a ¢25.384.078 millones (67,8% del PIB) o $41.418 millones. De ese total el 76,85% corresponde a deuda interna y el 23,15% a deuda externa.
MEGAPERIODO FISCAL
INFLUYE EN MEJORA
Pero ¿cómo hizo el gobierno para que los ingresos superaran a los gastos? A criterio del economista Gerardo Corrales, en mucho influyó que hubiera un pago extra de impuestos sobre utilidades.
Se debe recordar que el último periodo fiscal tuvo 15 meses, en lugar de 12. Eso hace que se registre un excedente respecto a un año atrás.
“De los datos se observa que el mes de marzo fue tan bueno que logró eliminar el déficit primario que se tenía y se logró cerrar con un superávit, pero hay que hacer la observación de que en marzo las empresas pagaron el impuesto a las utilidades que acumulaba 15 meses, lo que no sucedió en el primer trimestre de 2020.
Lo anterior debido al cambio de periodo fiscal por la Ley No.9635. Lo que sí debe preocupar es que los intereses siguen subiendo y representan un 1,67% del PIB”, explicó Corrales, quien insiste en una reingeniería de la deuda interna.
“Los vencimientos de $3.000 millones o $4.000 millones anuales se pueden refinanciar a mejores condiciones de plazo, lo cual quitaría presión al flujo de caja del gobierno, cerca de 3 o 4 puntos del PIB, y eventualmente de manera voluntaria para que no sea decretado como un default una renegociación de los nuevos bonos en cuanto a las tasas de interés”, añadió.
El ministro Villegas reconoció que el pago de los 15 meses pudo influir en el resultado fiscal a marzo, sin embargo acotó que a su criterio ese no es un tema tan importante.
“Creo que aquí al final hay que considerar que precisamente lo que se estaría pagando de más es lo que se dejó de pagar en diciembre, cuando precisamente no se cerró el año y cuando no era obligado realizar ese pago, sino que se trasladó a marzo.
Igualmente, lo que tenemos que ver es que el país está alcanzando un superávit primario, que esa es una buena noticia para todos y es un logro nacional”, manifestó.
Villegas se inclina por reducir la tasa de interés de la deuda pública mediante un estricto e inteligente control del mercado interno y la aprobación de empréstitos internacionales, que además “nos sirvan para liberar recursos internos para apoyar el proceso de reactivación económica”, destacó.
En cuanto al gasto del Gobierno central sin intereses creció un 6,79% con respecto a marzo de 2020. Esta tasa de variación se explica por el efecto de la incorporación de los órganos desconcentrados.
El titular de Hacienda recordó que estos representan un déficit en el balance contable. El gasto de dichas organizaciones al primer trimestre representó aproximadamente un 0,57% del PIB, es decir ¢214.346 millones.
PERIODISTA: María Siu Lanzas
CRÉDITOS: Fotos: Archivo
EMAIL: [email protected]
Sábado 17 Abril, 2021
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA