Soy un hombre soltero de 29 años. Tengo nueve meses de tener relaciones sexuales con mi novia y ella me gusta mucho. El problema es que cuando tengo relaciones sexuales siento náuseas, y se me inflama el estómago. A veces me pasa a lo largo del día, sobre todo en el trabajo, pero cuando es realmente incómodo es en el acto sexual. Me da pena por mi novia, que piense que no me gusta o que algo anda mal, pero yo sé que no es por ella.
Los trastornos digestivos se han vuelto cada vez más frecuentes en nuestra sociedad, debido a los grandes trastornos alimentarios a los que está sujeta la población. Comidas irritantes, saturadas de grasas, pobres en fibras, aunadas a una mala hidratación y a la falta de horarios para comer, son algunos de los factores que más afecta el funcionamiento, tanto del estómago como del intestino delgado y el colon.
Un sistema digestivo afectado es un sistema que da una serie de manifestaciones como agrura, acidez, gases, náuseas, vómitos, cuadros de diarrea, estreñimiento, así como dolor abdominal. Síntomas que pueden aparecer a lo largo del día, y al realizar cualquier actividad, como las faenas laborales, el ejercicio, durante el sueño y también cuando se tienen relaciones sexuales.
Desde luego que tener alguna de estas manifestaciones en pleno acto sexual representa toda una contrariedad en el ámbito sexual. Por un lado, genera cierta desconcentración y no permite un adecuado deleite, adicionalmente la pareja puede percibir los gestos de malestar e interpretarlos como un rechazo.
Bajo este panorama es importante señalar que hoy contamos con tratamientos sumamente efectivos para eliminar todos estos síntomas y evitar que se presenten en situaciones importantes como el acto sexual.
La tengo muy pequeña y me acompleja
Soy un hombre soltero de 23 años. Desde que desarrollé noté que el pene no me creció, desde entonces me he sentido muy acomplejado y he evitado tener relaciones sexuales. Ahora con la pandemia una compañera me invitó a que pasara con ella, que vive sola, y no me animé, porque me da miedo pasar una vergüenza. Nunca he hablado esto con nadie, pero creo que ya es momento de buscar ayuda. Me siento desesperado.
Los problemas con el tamaño del pene son muy frecuentes en nuestra cultura al punto que los estudios mencionan que porcentajes importantes de la población masculina temen tener un pene de pequeñas dimensiones.
Algunos reportes señalan que la disconformidad con el tamaño de los genitales ha aumentado en los últimos años, probablemente en relación a la proliferación de los sitios eróticos en internet, en los cuales se muestran varones con miembros de gran tamaño, muchas veces con prótesis o trucos fotográficos.
En algunos varones estas imágenes lesionan la autoestima sexual y generan cierta inseguridad sexual, aun cuando la inmensa mayoría tienen las dimensiones fálicas sobradamente suficientes para satisfacer sexualmente a la mujer.
Hoy la ciencia cuenta con tratamientos destinados a corregir aquellos problemas de tamaño en los cuales el pene no se desarrolló en la etapa de la pubertad, de tal forma que es recomendable consultar cuanto antes.
Debemos recalcar que, aun cuando podemos resolver el problema del pene pequeño, no podemos aumentar, a gusto del paciente, el tamaño del pene que tiene dimensiones normales, es decir, si el pene es de un tamaño normal, no podemos aumentar su tamaño más allá de unos escasos centímetros.
