El vulcanólogo de la Universidad de Costa Rica, Gino González, informó que las precipitaciones que trajo el huracán Otto generaron un incremento considerable en el nivel de las lagunas que se encuentran en los volcanes Turrialba e Irazú.
González explicó que notó varios deslizamientos a lo largo del camino, además enfatizó que se calcula que el volumen de la laguna de Playa Hermosa equivale más o menos a unas 40 piscinas olímpicas.
“La lluvia encima de los volcanes, principalmente en el Irazú, en estos últimos días han sido bastantes intensas, solo en el mes de noviembre llovió cinco veces más de lo que llueve normalmente.
Por ejemplo, en el caso de la laguna Playa Hermosa del Irazú es una planicie que está con un poco de depresión, tiene 1,2 metros y haciendo los cálculos de volúmenes más o menos eso equivale a unas 40 piscinas olímpicas.
En el cráter central hay un pequeño laguito que es efímero, pero teníamos tiempo de no verlo, por lo menos desde enero del 2012”, manifestó.
Para el experto este aumento del nivel en las lagunas demuestra cómo un fenómeno meteorológico puede afectar la hidrología de los volcanes.
“En el caso del Turrialba propició mayor nivel en el lago central y sería interesante ver el comportamiento de la fumarola porque el 95% es agua. Como tiene tanta agua cargada en el sistema habría que ver cómo podría eventualmente desencadenar”, añadió.
Mientras tanto, las insistentes lluvias ayudaron a que la cuenca del río Toro Amarillo se limpiara de la ceniza que se depositó durante la reciente etapa de erupción del Turrialba. Incluso se informó que donde desemboca el río Sucio se percibió un olor a azufre por el material arrastrado.
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CRÉDITOS: Fotos: Gino González
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Miércoles 30 Noviembre, 2016
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