A pesar de que la Ley de Patentes busca regular el comercio en todos los cantones del país, muchos alcaldes han comprendido que esta normativa está dirigida únicamente a aquellas actividades donde existe un crecimiento del capital de quienes están inmersos en esta economía y no para aquellos que lo poco que producen es para satisfacer las necesidades básicas de su familia.
Por otra parte, los pregoneros, por lo general, tienen limitada su actividad económica a la venta de un solo producto, los periódicos. Es por eso que muchos gobiernos locales han considerado innecesario “lastimar” a estos trabajadores, quienes además solo pueden realizar esta actividad durante pocas horas del día.
“En el tema de las patentes es necesario hacer una diferenciación, lo que son comercios formales, que tienen toda una estructura con una serie de oportunidades, y las otras, que se de dedican de una forma más informalmente con algún tipo de autorización y que no tienen capacidad para estar pagando a las municipalidades. Creo que ahí debe haber una consideración especial a esos y a otros”, comentó Roberto Thompson, alcalde de Alajuela.
Una idea similar tiene Randall Madrigal Ledezma, alcalde interino de Santo Domingo de Heredia, quien aseguró: “No tenemos ninguna regulación a nivel de eso, pero además esta es una actividad de subsistencia, que permite alimentar a muchas familias. Si se quisiera regular habría que encontrar un punto de equilibrio entre ambos”.
Madrigal considera que cobrarles a quienes venden periódicos es como querer limitar el derecho que tienen los ciudadanos a informarse a través de las noticias. No obstante, sí es importante que el municipio defina en qué lugares es mejor que se acomoden los pregoneros para que además de tener un buen punto de venta no afecten el paso de peatones.
En el caso del cantón josefino de León Cortés, ellos definieron en su reglamento municipal el tipo de actividades, que a pesar de ser comerciales podrían considerarse una excepción el cobro de patentes.
Por esa razón no les cobran a los vendedores de periódicos, tampoco tienen mayores limitaciones para realizar esta actividad, pues se entiende que los ingresos alcanzan apenas para la sobrevivencia de sus familias.
“Si nosotros implementamos el cobro a todo habría que darles patente a los agricultores, a los docentes por realizar su trabajo, es casi una duplicidad al impuesto sobre la renta”, explicó Leonardo Quesada, alcalde de León Cortés.
