Por sexta vez, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) detuvo a un abogado de apellidos Cerdas Salazar como sospechoso del delito de infracción a la Ley de Psicotrópicos, esta vez armado hasta los dientes con un fusil de asalto AK-47.
Su captura se produjo durante un allanamiento que los agentes ejecutaron en dos viviendas ubicadas en el centro de Alajuela, a pocos metros del edificio de los Tribunales de Justicia.
Álvaro González, jefe de la policía judicial en Alajuela, manifestó que las nuevas pesquisas contra el sujeto de 61 años, empezaron en setiembre de 2018 y con ellas se logró determinar que se dedicaba al cultivo de marihuana para venta amparado en el uso recreativo.
De acuerdo con González, la droga era para el tráfico local y la suministraba a personas de la comunidad alajuelense con problemas de adicción, así como a vecinos de otras provincias que se trasladaban hasta ahí.
“Para fines medicinales, esa era la mampara, pero mediante diferentes técnicas y estrategias de investigación demostramos también que se daba para el consumo masivo de personas con problemas de adicción, para alterar su sistema nervioso usándolo como un estupefaciente que produce ciertos efectos en el cuerpo como depresión y ansiedad, que tardan semanas en el cuerpo”, detalló.
Así las cosas, este jueves la policía judicial ingresó a los dos inmuebles. Uno de ellos se ubica 100 metros al este de los Tribunales de Justicia, donde Cerdas residía.
Mientras que el segundo está 75 metros al sur de dichas instalaciones, el cual utilizaba como oficina, donde también había un laboratorio con un plantío de marihuana.
Respecto a los decomisos, González detalló que, a diferencia de las cinco detenciones anteriores, esta vez a Cerdas le incautaron cuatro armas de fuego: 1 fusil de asalto AK-47, 1 escopeta 12, 1 revólver calibre 38 y 1 carabina calibre 22.
Además en los inmuebles se halló más de 4,5 kilos de picadura de marihuana lista para enrolar, 15 plantas de Cannabis sativa, capullos para producir aceite, 8 kilos de creepy, 2 kilos de semilla, hojas, tallos, dinero en efectivo, materia prima e implementos como abanicos, lámparas y agroquímicos, los cuales se utilizan para el crecimiento y desarrollo de las plantas.
SEXTO ALLANAMIENTO
De acuerdo con González, esta es la sexta vez que el OIJ de Alajuela allana el laboratorio de Cerdas por este delito. La primera se produjo en febrero de 2013, sin embargo en esa ocasión no se obtuvo el material suficiente en el caso, por lo cual se dio un sobreseimiento definitivo.
En los años siguientes al abogado lo sorprendieron cuatro veces, intervenciones que se llevaron a juicio en 2016, pero una vez más logró salir librado de la justicia, pues un tribunal lo absolvió al determinar que no había suficientes elementos para condenarlo.
“En ocasiones anteriores la estrategia y la defensa técnica se basó en que se trataba para fines medicinales, incluso hay algunas convenciones de estupefacientes de 1961 que hablan un poco del tema y por ahí se basó la estrategia de la defensa”, comentó.
Walter Espinoza, director del OIJ, expresó que en esta oportunidad los agentes ingresaron a la vivienda e hicieron los respectivos decomisos, con lo cual se espera obtener un mejor resultado.
Para el titular de la policía judicial esta vez algunas de las pruebas que tienen mayor peso son la droga decomisada, la compra del estupefaciente directamente al sospechoso en al menos ocho oportunidades, así como información fraguada por el abogado, en la que da precios y habla de su actividad de comercialización.
PERIODISTA: Mónica Matarrita Mora
CRÉDITOS: Fotos: Jesús Ramírez y OIJ
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Viernes 09 Agosto, 2019
HORA: 12:00 AM
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