Carmelita siente la presión del descenso. Está a solo 1 punto del frío sótano de la tabla acumulada, que castiga con perder la categoría.
El cuadro verdolaga es presa de sus propias decisiones al dejar salir figuras de peso como Suhander Zúñiga, Jonathan Martínez, Bryan Rojas y otros jugadores de experiencia, aparte del constante cambio de entrenadores.
Empezó con Mario Víquez, después tomó las riendas Marco Herra, siguió Guilherme Farinha y ahora tiene el control Fernando Palomeque.
La situación de los carmelos pasó de ser acongojante a crítica. Al inicio del torneo arrancó con 24 unidades, 14 más que Universidad de Costa Rica, y en este momento están solo 1 punto arriba.
Es decir, en 13 jornadas dejaron escapar una diferencia de 13 puntos. Seña del mal momento que atraviesan se refleja en el último lugar del Clausura que ocupa con 6 unidades.
FÁBRICA EN PELIGRO
Hay quienes consideran una lástima que Carmelita llegue a perder la categoría por ser una fábrica de futbolistas. Actualmente es de los clubes de primera división que más apuestan por su cantera, aquella que nutrió el proyecto Wilmer López.
Los números certifican que el cuadro de La Barriada no tiene temor alguno de poner a jugar jovencitos. Suma 5.390 con futbolistas menores de 21 años, siendo el líder en este apartado.
Les ha dado oportunidad a 12 jugadores Sub21 y 3 de ellos debutaron en este certamen. Son Keylor Álvarez, de 19 años, Sigi Andrés Juárez, también de 19, y Raymond Madrigal, de 18.
Su filosofía se basa en alinear jugadores porque tienen la capacidad de hacer las cosas bien sin mirar su edad. Tanto así que Brandon Aguilera tiene solo 15 años y ha jugado 176 minutos, lo mismo que José Rodolfo Alfaro, quien apenas tiene 18 y ha estado 305 minutos en la cancha, igual que el portero Kevin Chamorro.
De esa manera muchos nombres del plantel carmelo han tenido la oportunidad siendo juveniles, así como otros que entrenan con el primer equipo y esperan su oportunidad.
Pero esa fábrica de futbolistas corre peligro con la amenaza del descenso. El gerente deportivo Roy Morales sostiene que sería ingrato que el club caiga a la Liga de Ascenso por el proyecto de abrirle la puerta a la juventud, práctica que beneficia a las diferentes categorías de las selecciones nacionales.
Aunque también es claro en que en el fútbol lo que vale son los resultados, por lo que confía en que Palomeque saque el equipo a flote.
“Sería para nosotros un desastre (descender) y es que aportamos varios jugadores a las selecciones Sub17, Sub20 y Sub23. Sería desastroso porque hay confianza en lo que hacemos en divisiones menores”, expresó.
DECISIONES
La directiva a cambio de nivelar las finanzas deja salir figuras que dejaron un vacío enorme en el plantel. No obstante, Morales enfatiza en que la partida de jugadores permite traer recursos frescos que son necesarios para el buen funcionamiento de la organización.
“Sabíamos que con las salidas el equipo se iba a debilitar un poquito. Se pensó también en la parte de superación de los muchachos y en la parte económica del club. Tal vez sí nos faltó haber hecho alguna contratación al cierre de inscripciones. Si no pudimos, peleamos con lo que tenemos. También nos ha afectado tener varios jugadores lesionados”, añadió.
Ante todo el director sostiene que guardan la fe de evitar el descenso. “Uno se siente preocupado, pero hay confianza en el trabajo del cuerpo técnico y jugadores para salir adelante. No vamos a ter problema porque vienen series particulares”, finalizó.
