Granada, Nicaragua.- En la ciudad colonial de Granada se lleva a cabo la undécima edición del Torneo Internacional de Ajedrez Arnoldo Tenorio In Memoria, al que llegaron más de 30 participantes de países de la región, así como de México.
De Costa Rica participan tres exponentes, que son Felipe Fernández, Brian Granados y Pamela Salas. Todos compiten en la categoría élite y buscan mantener la hegemonía tica en el deporte ciencia en Centroamérica.
Uno de los competidores que viene de un país fuera de la región es el mexicano Roberto Navarro Segura, quien es un maestro internacional con amplio recorrido y más de 40 años de experiencia.
Vivió hace muchos años en Nicaragua, donde se convirtió en campeón, y es un apasionado por el ajedrez. De ahí que regresó al territorio pinolero para medir nuevamente el nivel centroamericano, el que considera viene en retroceso.
“Lo que he observado a lo lejos, salvo Costa Rica, que es la excepción, es que el nivel de juego en Centroamérica desde hace 40 años que participo es el mismo.
Aquí en Nicaragua inclusive se ha estancado porque hace 40 años uno se encontraba competidores bastante fuertes, con más de 2.300 puntos en el ranking, y actualmente no hay uno que pase esos 2.300, si acaso uno. El mismo panorama en Guatemala y El Salvador”, enfatizó.
Navarro Segura apunta que casualmente certámenes como el Arnoldo Tenorio sirven de fogueo para los asistentes porque enfrentan a rivales de otros países, que si bien es cierto se manejan por las mismas reglas, cada uno tiene un estilo propio.
“Costa Rica es la excepción del ajedrez centroamericano, es el caso contrario, porque hace 40 años no tenía tantos jugadores y ahora cuenta con dos o tres ajedrecistas de muy buen nivel”, añadió.
Considera a Alejandro Ramírez y Bernal Alfaro, dos de las principales cartas ticas, como referentes del ajedrez de Latinoamérica y más allá.
“No soy un gran conocedor del tema para opinar a profundidad porque lo veo desde lejos, pero con competidores como Alejandro Ramírez se dio una gran promoción para el país, porque siempre un jugador destacado en cualquier parte genera un boom.
Aunque no sea un país ajedrecístico, un jugador fuerte genera un nivel alto. Este es el caso de ustedes con Alejandro, quien tiene un nivel alto y lo conocí aquí en Nicaragua cuando tenía 15 años. Otro es Bernal Alfaro”, comentó.
Pese a su amplia experiencia al frente de los tableros, no ha tenido la oportunidad de enfrentar a muchos competidores ticos.
Opina que México es otro lugar donde el deporte ciencia ha venido a menos en los últimos años. Señala a los responsables de llevar el deporte en la federación de cada país y al poco interés por trascender de los jugadores como las principales causas.
“El nivel general del ajedrez es el mismo o más bajo, eso se ve reflejado en las olimpiadas de ajedrez. Hace 30 o 40 años llegamos a ocupar los primeros lugares a nivel mundial y actualmente nos conformamos entrando entre los primeros 50, pero realmente estamos más debajo de eso”, indicó.
Para que esto cambie enfatiza en que “lo primero que se requiere es actitud, tener mucha fuerte de voluntad, espíritu de lucha, porque a lo largo de los años he conocido jugadores muy talentosos, que se destacaron rápidamente, pero no le dedicaron el tiempo necesario de estudio y a la larga fueron rebasados por jugadores que no sabían tanto, pero perseveraron y a los años se convirtieron en grandes maestros”.
PERIODISTA:
CRÉDITOS: Foto: Jesús Ramírez
EMAIL:
Sábado 23 Febrero, 2019
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA