La Oficina del Consumidor Financiero es una instancia creada para apoyar a los usuarios de servicios financieros y brindarles una adecuada defensa de sus derechos. Esos derechos tienen que ver, por ejemplo, con el suministro oportuno de información, previsto incluso en la Constitución Política de Costa Rica. Esta información se tendría que cumplir en el momento de firmar una hipoteca para la compra de la casa, para una prenda al comprar el carro, o la apertura de una cuenta de ahorro, por citar algunos casos frecuentes.
El ejercicio de esos derechos demanda de las entidades financieras contar con: 1) Personal bien entrenado. 2) Folletos explicativos de fácil comprensión. 3) Que los documentos que se vayan a firmar se le suministren al cliente con tiempo, y 4) Que esos documentos estén redactados de una manera sencilla para que cualquier persona los pueda comprender.
Así como las entidades financieras tienen estas obligaciones, los consumidores también tienen las suyas, como corresponde cuando se dispone de derechos. El consumidor financiero está en la obligación de leer los contratos que las entidades le dan para firmar, porque ese documento contiene todas las reglas a las que se someten la entidad y el cliente.
Con frecuencia las personas pasan de lejos lo que indica el contrato y firman condiciones que no entienden, o que podrían cambiar algún detalle de la operación si ocurre determinado evento. En esos casos, es difícil que el cliente se pueda defender, pues su firma demuestra que estuvo de acuerdo.
Otra obligación que tienen los consumidores es revisar los estados de cuenta que la entidad financiera está obligada a suministrarle. De poco sirve verificar que las entidades envían los estados de cuenta, si el consumidor no comprueba que los movimientos en su cuenta son correctos, que no haya cargos indebidos, o que los montos por pagar sean los usuales.
Es igual de útil mantener un contacto frecuente con la entidad financiera, especialmente si es usuario de tarjetas de crédito. Por ejemplo, si el consumidor va a salir de viaje, sería conveniente notificarlo a la entidad, de manera que si ocurren cargos en cualquier lugar del mundo en donde no se encuentra el tarjetahabiente, se pudiera anticipar un posible fraude. Inclusive, el consumidor puede notificar a la entidad sobre el monto que piensa gastar, por lo que, si llega un cargo muy superior, esta podría detectar un fraude.
Conforme a lo anterior, el mercado financiero se ve muy favorecido si las entidades participantes logran consolidar una disciplina de industria, entendido como un comportamiento que no solo respeta la ley, sino que aplica normas lógicas de trato con sus clientes.
Pero los clientes también deben observar una disciplina de consumidor, en que ponen cuidado en la información que le suministran, reclama a tiempo lo que considera defectuoso, y pregunta todo aquello que le resulta extraño. Es la manera más efectiva para lograr una relación duradera y favorable con su entidad financiera.
En caso de cualquier duda o consulta, recuerde que puede contactar de forma gratuita y confidencial a la Oficina del Consumidor Financiero, a través de nuestros canales de comunicación, tales como nuestro Facebook (Consumidor Financiero), aplicación móvil: banca amigable, correo electrónico: [email protected], o bien, al teléfono 2221-6624.
PERIODISTA:
CRÉDITOS: Danilo Montero R. Director Ejecutivo, Oficina del Consumidor Financiero
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Lunes 12 Noviembre, 2018
HORA: 12:00 AM
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