El grupo de secuestradores que mantienen a William Sean Creighton Kopko, conocido como Tony, obligó por segunda vez a que les diera las claves para acceder al monedero donde transfirieron un monto aún no determinado.
Tal como lo ha informado ampliamente DIARIO EXTRA, la víctima de 43 años, quien es naturalizado costarricense, vive con su familia en Santa Ana y dirige varias casas de apuestas en San Pedro, Montes de Oca, donde lo vieron por última vez al salir de su oficina.
El 24 de setiembre, se montó solo en su carro y a las 10 p.m. fue interceptado en el sector de Granadilla de Curridabat por dos pistoleros en motocicleta, quienes lo apuntaron y lo montaron a un taxi en que esperaban dos hombres más para trasladarlo hasta su sitio de cautiverio.
Mientras que un sujeto cubriendo su cabeza con un casco de motocicleta y al parecer de raza negra se llevó el Porsche del gringo hasta San Francisco de San Isidro, Heredia, donde lo chocó intencionalmente contra un muro de concreto y un portón metálico ubicado a un lado de la vía que da ingreso a una propiedad privada.
Este hombre, quien podría ser uno de sus allegados, tendría un buen manejo de inglés, ya que el empresario casi no habla español.
Fuentes confidenciales mencionaron que la mente maestra del secuestro sería un hombre que practica karate y artes marciales mixtas, que se estaría acompañando de oficiales de seguridad que simulan delitos, inclusive un recluso les aportaría ideas.
DINERO SEGURO
Trascendió que Tony no tenía guardaespaldas, es uno de los tres hombres más fuertes de las 300 casas de apuestas que operan en Costa Rica, por semana mueve alrededor de $20 millones en criptomoneda, lo que se considera dinero seguro.
Fuentes ligadas al caso mencionaron que no cualquier persona accede al monedero de bitcoin, dado que son muchos pasos para llegar a él y poder transferir el dinero en una operación que lleva hasta 120 direcciones con el fin de evitar fraudes.
Las autoridades no creen que los motivos del secuestro sean por narcotráfico, sin embargo aceptan que este tipo de transacciones se da para el lavado de dinero que es ilegal en Estados Unidos y en nuestro país las investigaciones están en pañales.
Trascendió que Tony nació en Miami, donde tiene muchos contactos que recolectan el dinero, es una red fuerte. En crédito por semana se mueven hasta $60 millones en temporada alta y las ganancias netas superan los $15 millones.
Además presta servicio a una parte de Asia y también opera en Nicaragua.
APODOS PARA DESPISTAR
William Sean Creighton Kopko usa el alias de Tony para desviar la atención de las autoridades gringas, quienes esperan que toque suelo para detenerlo por cargos criminales por los delitos que representan las casas de apuestas.
No se descarta que la cantidad de una transacción que viene en un procesador de cheques o tarjetas de crédito llegara a oídos de extraños, quienes pasarían la información de que Tony tenía un monto fijo de plata.
Según los expertos, en este tipo de moneda que se trabaja en las casas de apuestas, con la ausencia de Tony, algunos proveedores empezarían a hacer fiesta, por lo que vaticinan sería pronto el desplome financiero de la empresa del estadounidense.
Los investigadores del FBI y del Organismo de Investigación Judicial continúan averiguando el paradero de Tony, quien estaría en San José o en la zona del Caribe.
El karateca sospechoso maneja oficiales de seguridad vinculados con secuestros y torturas contra ciudadanos orientales hace varios años.
