Desesperada en la búsqueda de respuestas, así se encuentra doña Myriam Dávila desde el 22 de agosto que desapareció su hijo, identificado como Gabriel Antonio Miranda Dávila. Por ese motivo, recurrió a DIARIO EXTRA con la esperanza de encontrar nuevas pistas y hallar a su retoño.
El desaparecido tiene 44 años, vivía con ella y su esposo en el precario La Chanchera, en Concepción Arriba de Alajuelita, pero aquel sábado, que coincidió con las manifestaciones de nicaragüenses en el parque de La Merced, las cosas cambiaron.
“Estábamos almorzando en nuestra casa, de pronto le dije a Tito (Gabriel) que apenas terminara de comer se bañara y cambiara de ropa, porque había culto más tarde. Se levantó sin decirme nada y se fue. Luego me trasladé a la cocina, mi esposo me dijo que Tito se puso los zapatos y salió de la casa, lo traté de seguir, pero no lo pude alcanzar”, comentó.
Desde aquel momento, le perdió el rastro. Horas después, la angustiada madre se desplazó al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) para poner la denuncia de su desaparición, pero hasta la fecha no han encontrado más rastros.
Por eso, decidió hacer la búsqueda por sí misma, se movilizó por varios puntos de la capital para seguirle los pasos, ha conversado con algunas personas, pero no ha obtenido ningún resultado positivo.
“Lo fui a buscar al parque de La Merced, la Fuerza Pública me dijo que lo buscara en Migración, pero no apareció en la lista que ellos tenían como detenidos por disturbios. Hace unos días lo vieron por el Mercado Mayoreo en horas de la noche, pero cuando me avisaron ya no se encontraba ahí”, relató.
Sin embargo, no es la primera vez que le sucede esto. En menos de cinco años se trata de la tercera ocasión que vive dicho trago amargo, por eso espera que sea la vencida y no le vuelva a ocurrir.
“Hace dos años se desapareció, pero la Fuerza Pública lo encontró a las pocas horas cerca del Polideportivo de Concepción y lo remitieron al Hospital Psiquiátrico, porque lo divisaron sin ropa. Después se dieron cuenta que actuó así porque se descontroló su tratamiento médico, pero en este caso no sé dónde está”, agregó.
La principal preocupación de la señora es el tratamiento médico que mantiene su hijo desde hace varios años, ya que el desaparecido sufre de ataques epilépticos y problemas de memoria.
Si tiene más información sobre el paradero de esta persona, puede brindar información al número telefónico 6014-3466.
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CRÉDITOS: Fotos: Jesús Ramírez
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Miércoles 19 Septiembre, 2018
HORA: 12:00 AM
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