El cuarto en discordia del grupo es Senegal, que participa por segunda vez en su historia en una copa del mundo. Los precedentes no pueden ser más positivos, puesto que, en su primer y único gran torneo, en Corea-Japón en 2002, lograron contra todo pronóstico ganar a Francia en la fase de grupos y a Suecia en octavos y plantarse en cuartos de final. Desde entonces, aquel equipo que había derribado la puerta de la élite dio la sensación de desaparecer. Perdió todo protagonismo y se ausentó de todas las grandes citas y primeros planos. Pero ahora, con uno de aquellos héroes, Aliou Cissé, retorna con la fuerza y vigor de antaño, dispuestos a volver a encandilar al mundo.
El seleccionador de los Leones de Teranga, Aliou Cissé, capitán del combinado que hizo historia hace 16 años con Bruno Metsu en el banquillo, dirige a un grupo de futbolistas talentosos, liderado por Sadio Mané (Liverpool) y con nombres como Kalidou Koulibaly (Nápoles), Idrissa Gana Gueye (Everton), Cheikhou Kouyaté (West Ham United), Moussa Sow (Bursaspor), M'Baye Niang (Torino) y Keita Baldé Diao (Mónaco).
El seleccionador sabe que muchas de las opciones de clasificación para octavos pasan por el momento de Mané, una de las estrellas del Liverpool y futbolista más caro en la historia del balompié africano.
La incorporación del franco-senegalés M'Baye Niang -jugó su primer partido con Senegal en octubre de 2017- completa un portentoso tridente de ataque, en el que, además de Sané, también brilla el hispano-senegalés Baldé, futbolista del Mónaco.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Miércoles 13 Junio, 2018
HORA: 12:00 AM
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