Un hombre de apellido Salas declaró en el juicio seguido contra un abogado de apellidos Muñoz Nanne y la jefa del departamento de Investigaciones del Banco de Costa Rica, apellidada Alfaro Valenciano, pese a contar con una causa abierta por falso testimonio.
El proceso se lleva a cabo por la desviación de aproximadamente ¢1.750 millones a cuentas en bancos nacionales y en el extranjero, dinero que corresponde al capital familiar de la empresa Muñoz&Nanne en San Pedro de Montes de Oca.
Salas era empleado del ahora imputado Muñoz Nanne hijo y en un juicio anterior rindió una declaración que según se demostró nunca estuvo apegada a la realidad, por lo que la Fiscalía lo denunció por tales hechos irregulares.
Los abogados Carlos Ibarra García y Francisco Dall’Anese, defensores de Muñoz Nanne y Alfaro Valenciano, respectivamente, alegaron durante la declaración del sujeto que era una novedad. El tribunal de juicio no presentó oposición.
Salas indicó durante el debate que existían diferencias entre hermanos dentro de la compañía Muñoz&Nanne y que eso tenía alterada la salud de Miguel Ángel Muñoz Argüello, propietario y fundador de las empresas familiares.
El debate continuará en las próximas horas con la declaración del principal imputado, Muñoz Nanne, a quien condenaron por quitarle a su padre los certificados a plazo donde manejaba todo el dinero de la familia.
