El frente frío que azota al territorio nacional afecta al menos cuatro carreteras nacionales, debido a ríos desbordados y derrumbes que se presentaron durante las últimas 48 horas. Los deslizamientos obstaculizan el paso de vehículos donde en algunos casos la carpeta asfáltica se ha levantado y la crecida de ríos mantiene con cierres preventivos dichas rutas para evitar hechos lamentables.
David Meléndez, jefe del Departamento de Emergencias del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), dijo que se trata de al menos siete trayectos que presentan problemas.
“Esta mañana ha sido muy movida, tenemos desde cierres completos como en algunos tramos de la ruta 32 hasta pasos regulados. Toda la mañana hemos realizado labores de mantenimiento y recolección de desechos para habilitar caminos”, expresó.
Este lunes las condiciones climáticas obligaron al cierre de la ruta 32. Si bien es cierto la maquinaria se encuentra en los puntos donde cayó material a la carretera, la apertura no tiene una hora definida.
RUTA 32 Y OTRAS CERRADAS POR LA LLUVIA
En el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) informaron que se produjo un gran deslizamiento que obstruyó por completo el paso 700 metros después del túnel Zurquí en dirección a Limón.
Al mismo tiempo se reportan problemas en la capa asfáltica en las inmediaciones del puente sobre el río Chirripó, por lo que el paso se encuentra regulado y en observación.
Mientras tanto, en la ruta 141 se informa de un cierre parcial 2 kilómetros antes del puente sobre el río La Vieja, carretera a San Carlos, porque la lluvia obstruyó un carril.
En la ruta nacional 10 se recogió material que cayó cerca del Hotel Turrialtico, pero por el momento se trabaja también con un paso regulado para los conductores.
Al mismo tiempo en la ruta 225, en el sector de Pejibaye y Ventanas 3 de Quebrada Honda, se reporta un cierre total, también a causa de la caída de material sobre la vía.
Otros puntos que están bajo vigilancia constante y se llevan a cabo cierres para todo tipo de vehículos son la ruta 36 por un desbordamiento del río Bananito y la 126 de Varablanca por deslizamientos.
La lluvia constante dificulta más los trabajos de limpieza y potencian el eventual desprendimiento de materia vegetal que caería en la carretera, haciendo el cierre indefinido.
Meléndez dijo no tener idea de cuánto dinero se invierte en los trabajos de rehabilitación vial, pero que sí se puede hablar de costos millonarios para el Estado.
