MANILA. (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el que tenía una muy buena relación con su par filipino, Rodrigo Duterte, mientras un funcionario de la Casa Blanca afirmó que el tema de los derechos humanos solo fue mencionado brevemente cuando ambos se reunieron al margen de una cumbre en Asia. La reunión entre ambos presidentes fue una de las más anticipadas en la cumbre de líderes de este y sudeste de Asia en Manila, cuando grupos de derechos humanos presionan a Trump para que asuma una postura dura con Duterte por su sangrienta guerra contra las drogas, en la que han muerto miles de personas.
"La conversación estuvo focalizada en ISIS (Estado Islámico), drogas ilegales y comercio", dijo la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders. "Los derechos humanos aparecieron brevemente en el contexto de la lucha de los filipinos contra las drogas ilegales", agregó. Sanders
Más de 3.900 personas murieron en una guerra contra las drogas que Duterte declaró cuando asumió el cargo el año pasado. Su gobierno dice que la policía actúa en defensa propia, pero los críticos afirman que existen ejecuciones sin que haya ninguna rendición de cuentas.
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Martes 14 Noviembre, 2017
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