Miles de cafeteros y peregrinos de países vecinos recibieron con una felicidad indescriptible a su Santidad Francisco en su llegada a Colombia.
Setenta y dos periodistas lo acompañaron en su viaje desde Roma, a bordo del avión de la aerolínea Alitalia, Pastor Uno, que aterrizó puntualmente en el Aeropuerto Militar de Catam, donde fue recibido por monseñor Ettore Balestero, nuncio apostólico de la Santa Sede en Colombia, el presidente Juan Manuel Santos y su señora esposa María Clemencia Rodríguez Múnera.
La interpretación de la Orquesta Sinfónica de Colombia y el Coro de la Ópera Nacional, así como la música típica cafetera, en este caso la cumbia, alegraron el arribo de su Santidad al aeropuerto.
Hizo el recorrido en el papamóvil hacia la casa de la Nunciatura Apostólica ubicada en Teusaquillo, donde al igual que lo hizo en la Ciudad de México pernoctará.
El desplazamiento tardó 2,5 horas, saludó a miles de fieles que pedían su bendición. Divisó dos importantes monumentos religiosos: el Cerro de Montserrat y el Cerro de Guadalupe.
DISPOSITIVO DE SEGURIDAD
Desde muy tempranas horas, la Avenida El Dorado fue copada por el Ejército Nacional de Colombia, que con perros, armas y dispositivos custodiaron prácticamente cada metro.
Las autoridades informaron previamente que el Sistema Trans Milenium, transporte colectivo en Bogotá, iba a estar restringido y cerrado prácticamente en todo el perímetro donde se realizó el recorrido papal.
Francisco en el avión envió un mensaje: “Reza por Venezuela para que encuentre un camino de solidaridad, justicia y concordia”. Esta es la preocupación del Papa sobre la situación que se vive en ese país. Los venezolanos que llegaron a Bogotá abogan por su intervención a efecto de que se instale un corredor humanitario entre la frontera con Colombia.
QUEJA DE BOGOTANOS
Una de las críticas que hacen los bogotanos y que es generalizada en las calles es que el Gobierno se está luciendo en los lugares donde tiene que pasar su Santidad, pero hay muchos barrios con necesidades y no son atendidos.
Aducen que limpiaron las calles y todo luce organizado, pero hay sitios en abandono.
La comerciante colombiana Laura Hurtado manifestó ser anticlerical y expresó: “Me parece una visita que no hace falta, no es necesaria porque es una gran inversión económica de nuestro país, habiendo tantas carencias y tanta pobreza, tanta indigencia, tanta mala calidad de la asistencia sanitaria, gente muriéndose en los hospitales, hambre en todos los barrios, niños muriéndose de desnutrición, gente en la cárcel aguantando maltratos, a veces son hasta inocentes, porque no hay cómo solucionarles el caso y se invierte demasiado por una visita que no va a aportar nada realmente”.
SALE REGALADO
Su Santidad, una vez que por fin pudo llegar a la Nunciatura Apostólica en Teusaquillo, rezó un avemaría y bendijo a todos los presentes, pero cuando ya se pensaba retirar a descansar fue sorprendido por un grupo de jóvenes que conviven en las calles y padecen diferentes tipos de adicciones, los cuales bailando un rap lograron alegrar al Papa
Además le entregaron una ruana (abrigo típico) como símbolo del frío que soportan en las calles, una vela de esperanza, lo que representa el Papa para ellos, y un vitral que es la Eucaristía, la comunión que todos debemos abrazar.
Uno de los muchachos le dijo: “Santo Padre, somos desechables para la sociedad porque somos tierrosos, que vivimos en la calle”.
Al Papa, claramente conmovido y emocionado, no le quedó más remedio que volver a agradecer a los jóvenes a quienes les hizo repetir la frase “no se dejen robar la alegría y la esperanza.
¿QUÉ SIGUE?
En Villavicencio, el Santo Padre tiene previsto -en la Catedral San Francisco de Asís- un encuentro con dieciséis víctimas de la guerra.
Poco a poco los colombianos han ido comprendiendo cuál es la razón primordial de la visita papal: sanar sus heridas, olvidar tanto pasado de muerte, de sangre, de guerra, para dar ese primer paso que debe ser el perdón y la reconciliación.
Es dar un ejemplo y Francisco cumple al dar el primer paso con su arribo a dicho país suramericano. Es un momento histórico para abrazar la paz y la alegría.
BANDEJA PAISA
• En las casas de los barrios y los taxis son muy pocos los que lucen algún signo externo de la visita del Papa.
• Hubo ley seca en Teusaquillo, Santa Fe y Candelaria. Además se restringió la circulación de motocicletas tipo pandilleras con acompañante.
• En mi habitación, el café es Britt, pero el empaque dice “Hecho en Colombia”.
• Los ornamentos especiales que lucirá su Santidad en las cuatro misas que oficiará son una creación de las diseñadoras colombianas Mercedes Salazar y Pilar Castaño.
• Las 500 mil hostias fueron revisadas para que no se vaya alguna quebrada o con algún defecto.
• Los bogotanos madrugan para aprovechar ofertas y revender.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
CRÉDITOS: Vivian Quesada Foto: Agencia EFE
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Jueves 07 Septiembre, 2017
HORA: 12:00 AM
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