El modelo tarifario que se aplica a los autobuses sigue dando de qué hablar, en esta ocasión por parte de la Contraloría General de la República y los empresarios de dicho sector.
Ambas partes comparecieron ante la Comisión de Ingreso y Gasto Público, donde expusieron sus perspectivas contra el sistema y en especial contra la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep).
Durante casi tres horas de audiencia, los diputados Rolando González de Liberación Nacional, Luis Vásquez de Unidad Social Cristiana, Laura Garro y Víctor Morales de Acción Ciudadana junto con el libertario Otto Guevara y el demócrata cristiano Mario Redondo escucharon los alegatos y quejas.
En primera instancia fue Marta Acosta, jerarca de las Contraloría, quien explicó a los legisladores lo que sucedía con el modelo tarifario y la que expuso los descubrimientos hechos por su institución en cuanto a que el modelo necesita actualizarse.
“Quedaron temas sin actualizar y por eso no se da por cumplida dicha disposición, (...) nos daremos por satisfechos una vez que el modelo esté completamente actualizado, pero sí queremos se nos reporte la actualización”, declaró.
Entre su presentación comentó además el origen de 26 sentencias judiciales desfavorables para la Aresep por las denominadas “herramientas complementarias” para la estimación de las tarifas para el transporte.
“Es indispensable continuar y fortalecer los esfuerzos que den transparencia y objetividad a los mecanismos de fijación tarifaria, de tal forma que tanto prestatarios como usuarios de los servicios públicos tengan acceso a la información relacionada con costos e ingresos y el modelo tarifario en general para ejercer un efectivo control y exigir rendición de cuentas al regulador y a los prestatarios de servicios públicos”, explicó.
TAMBIÉN SE QUEJARON
Después de que los representantes del ente contralor expusieron sus puntos correspondió el turno a los empresarios de autobuses, quienes no ocultaron su descontento con la situación que enfrentan.
Entre ellos expuso Asdrúbal Fallas, presidente de la empresa Autotransportes San Antonio y uno de los representantes de la Cámara Nacional de Transportistas (Canatrans).
El autobusero dijo que Aresep no reconoce aspectos básicos de lo que implica manejar una empresa de este tipo y que los recortes hechos por la metodología resultan en que los libros y las arcas de sus compañías se vuelvan cada vez más frágiles.
“Estamos pidiendo a la Aresep que se apruebe un modelo completo y no uno con parches (...) el modelo que aprobó Aresep no está completo. Nuestro clamor es por un modelo justo, que reconozca los costos reales del servicio”, expresó.
El descontento de los autobuseros nació cuando en marzo de 2016 se publicó en La Gaceta la “Metodología para Fijación Ordinaria de Tarifas para el Servicio Remunerado de Personas, Modalidad Autobús”.
Desde ese momento se registran distintos movimientos por parte de los afectados, que van desde huelgas y paro de labores hasta marchas y manifestaciones frente a las oficinas de Aresep.
Las cámaras autobuseras, al igual que otros sectores del transporte público, han mostrado su descontento y preocupación en múltiples ocasiones y esperan que pronto se haga una modificación a la metodología.
