La situación que viven las empresas de transporte público en su modalidad autobús no solo mantiene en vilo a los propietarios de las compañías sino también a los choferes, que cada día ven cómo podrían perder sus trabajos.
Esto debido al modelo tarifario que aplica la Autoridad Reguladora de los Servicio Públicos (Aresep), el cual ha disminuido en gran medida las ganancias que las compañías perciben.
Que siga aplicándose, a pesar de la gran cantidad de advertencias, hace creer que el Gobierno de la República estaría llevando a cabo un complot contra los empresarios.
Así lo explicó Eduardo Porras, secretario general del Sindicato Costarricense de Trabajadores del Transporte (Sicotra), quien asegura que todo lo que sucede les hace creer que el Estado quiere sacarlos del mercado y dejarlos sin trabajo.
“Pareciera que el gobierno, al igual que otros políticos y Aresep, están unidos para hacer desaparecer a todo el empresariado nacional, meter un monopolio con una transnacional aquí y jodernos a los trabajadores”, expresó.
Esta hipótesis no es la primera vez que sale a la luz pública, pues hace varias semanas algunos empresarios denunciaron que desde el Consejo de Transporte Público (CTP) y el Consejo de Seguridad Vial (Cosevi) se han licitado unidades de transporte.
FILTRACIÓN DE CORREO ATERRORIZA
Luis Diego González, empresario autobusero, se mostró crítico al enterarse hace algunas semanas que se filtró un correo electrónico donde las instituciones preguntaban por el precio de una gran cantidad de autobuses.
El mensaje, al cual tuvieron acceso durante los primeros meses de este año, lo envió un funcionario de estas instituciones a un fabricante de autobuses, en el cual pedía especificaciones de las unidades y su precio.
“Hay un correo al que tuvimos acceso de un funcionario del Cosevi que se encuentra en el CTP y el cual pide una cotización para 1.550 autobuses de hasta 14 metros de largo”, manifestó.
Eso los hace pensar que el Estado quiere sacarlos del negocio para siempre y podría poner otro operador, convirtiendo el transporte público en un monopolio o algo semejante para quien ejerza la actividad.
“Nos quedamos intrigados de que hay planes mayores, el Estado no opera este tipo de cosas, ellos no compran esos autobuses, ¿entonces por qué un funcionario pide una cotización de esa magnitud?”, añadió.
El actual esquema tarifario solo toma en cuenta gastos relacionados con la operación del servicio, por lo que rubros como el mantenimiento de las unidades y reparaciones no son elegibles, lo que causa grandes pérdidas económicas.
Los choferes esperan que se lleve a cabo una reforma en la metodología actual, lo cual que los hará dormir más tranquilos y les asegurará llevar el sustento a sus hogares, sin pensar en que mañana pueden quedarse sin trabajo.
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Viernes 18 Agosto, 2017
HORA: 12:00 AM
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