Como una manera de ayudar a distintas organizaciones de bien social y a la vez liberar espacio en sus lotes de autos, el Consejo de Seguridad Vial (Cosevi) comenzó a donar miles de vehículos decomisados.
Dicha institución cederá más de 2 mil unidades entre camiones, automóviles y motocicletas cuyos propietarios nunca los reclamaron luego de ser confiscados por alguna falta a la Ley de Tránsito.
Así lo confirmó Cindy Coto, directora ejecutiva del Cosevi, quien declaró que el proceso empezó el viernes con las primeras 200 unidades a una organización no gubernamental (ONG) que los venderá como chatarra.
“En estas primeras etapas trabajamos en 21 lugares donde había vehículos detenidos, en este momento se entregan algunos a la Fundación Debí, son 230 vehículos ya desinscritos y ellos los utilizarán para proyectos de bien social”, declaró.
“Esta fundación se dedica a atender niños de comunidades problemáticas para tener redes de cuido y atenciones integrales, entonces son proyectos importantes para la sociedad”, añadió.
La idea de esto es que se aprovechen los materiales y así obtener fondos para esos proyectos, conllevando a que se atienda la problemática ambiental de salud y de espacio que enfrenta el Cosevi.
A su vez, Coto dijo que esta es una manera de beneficiar a personas físicas o jurídicas con proyectos que necesitan ser favorecidos con fondos con los que no cuentan ordinariamente.
Las instituciones y personas escogidas se seleccionaron mediante un registro de elegibles elaborado por el Ministerio de Hacienda, donde analizaron cada caso.
En las próximas semanas se espera entregar más vehículos para cumplir con el decreto de emergencia firmado por el presidente Luis Guillermo Solís.
También lo firmó Carlos Villalta, exministro de Obras Públicas y Transportes, en diciembre de 2016, cuando se dio a conocer la crisis.
Cada uno de estos automotores cuenta con más de cinco años de encontrarse en decomiso y cumplió un largo proceso para determinar que los propietarios no deseaban recuperarlos.
